Por @FelipeEladioMx
Las cosas, en especial lo relativo a la “cosa pública”, han tomado senderos inimaginables; cuando a finales de año todo era risas, bombos y platillos, las cosas en este 2022 para el actual régimen empezaron a enredarse, a complicarse, a desnudarse. Los actos de corrupción del gobierno autodenominado “de la cuarta transformación” fueron seleccionados hábilmente y reventados con precisión. Tomaron desprevenido al aparato propagandístico oficial, y hoy no saben qué hacer.
ENTREMOS AL LABERINTO
En los primeros días de enero se dio el relevo de Rogelio Jiménez Pons de la dirección general de FONATUR, dependencia responsable directa de la construcción de una de las tres Obras Insignias del Presidente Andrés Manuel López Obrador, el “Tren Maya”; recuerdo que desde mi cuenta de twitter les anoté que pronto escribiría en mi columna política las razones de ese relevo, y les adelanté que mis fuentes aseguraban que había sido sustituido por actos de corrupción, en los que se encontraban involucrados comunicadores, dueños de medios de comunicación. Hoy una parte de esa información en mi poder ha salido a la luz pública, mientras yo me hacía de más información, haciendo mis investigaciones periodísticas de manera sigilosa, tengo que reconocer que “mexicanos contra la corrupción, y el grupo Reforma” que trabajan conjuntamente sus investigaciones, me ganaron la nota, y lo hicieron público el pasado jueves 10 de marzo.
En aras de no abundar sobre una información que ya es pública, solo les recordaré que el directamente involucrado es Ricardo Salinas Pliego, propietario del grupo Azteca, que entre otras propiedades maneja la Televisora y el Banco; fue a este último al que la FONATUR de Rogelio Jiménez Pons le pagó al triple unos predios para el “Tren Maya”; esto está documentado, que constan en total con una extensión de 108 hectáreas, tienen un valor comercial de 407 millones de pesos, y el Gobierno Federal pagó por ellos el triple, mil 150 millones de pesos. El robo fue de casi 750 millones de pesos, unos 35 millones de dólares, como daño patrimonial. Y esto apenas es el hilo de la madeja.
OSCURO PASADIZO
En febrero llegó el tema de “La Casa Gris”, aún sin aclarar; duró más de un mes en las marquesinas de los temas nacionales de escándalo; cuando parecía que la guerra en Ucrania les daba algo de respiro involuntario al Gobierno Federal, llegaron las filtraciones de las llamadas del Fiscal Alejandro Gertz Manero, el fuego amigo que está quemando a más de un alto funcionario del gabinete presidencial, y que ya tiene dos semanas y no tiene para cuando bajar de las marquesinas, de hecho apenas el fin de semana al fuego se le puso gasolina, al filtrarse las denuncias contra el Secretario de Gobernación y hombre de todas las confianzas del Presidente López Obrador. El jueves reventó la otra bomba, nuevamente la agrupación civil, “Mexicanos Contra la Corrupción” documentó junto con sus medios de comunicación agremiados, el tema del millonario asalto a las arcas pública por parte del Grupo Empresarial Salinas, bajo la complicidad del Gobierno Federal.
Como no existe una estrategia de comunicación en el Gobierno Federal, no ha habido más reacción y/o salida para frenar la ola de información, que la realizada por el propio Presidente de la República, la que dicho sea de paso no ha sido nada efectiva y si desgastante y de reversión para él.
PASADIZO DE SALIDA
Con presiones, hostigamiento financiero, el Presidente Andrés Manuel López Obrador se ha hecho de algo de Prensa, televisoras y uno que otro periódico nacional y regional; eso le ha ayudado muy poco para difundir sus actividades y su verdad.
López Obrador, al igual que lo hizo Donald Trump, ejercieron desde el poder una persecución en general contra el grueso de los medios de comunicación; como todo mundo sabe, tras los grandes emporios periodísticos y de medios de comunicación hay grandes empresarios, y estos tarde o temprano pasan las facturas. Mi Presidente, mi paisano, se llevó entre las patas a la prensa marginal, a la pequeña, a la que es propiedad de periodistas de oficio; mucha de esa prensa está en las “benditas redes sociales” que tanto le ayudaron antes y durante varias de sus campañas; ya como gobierno metieron a la nómina a una buena parte de las personas que reciben beneficios de programas sociales para interactuar en las redes a su favor, por desgracia no han sido suficiente para contrarrestar los señalamientos de corrupción.
LA SALIDA
Si hoy fueran las elecciones y se volviera a presentar Andrés Manuel López Obrador como candidato a la Presidencia, volvería a votar por él; pero eso, como ahora, no nubla mi criterio para señalar sus desaciertos. *** Que tenga el mejor de los martes; nos procuramos mañana.*** Comentarios y denuncias al correo felipeeladiojs@gmail.com y/o al whatsapp 9134036474.