Por: Crystiam Estrada Sánchez
Alarmante que, el 95% de las mujeres sufren de violencia o algún acto que atenta contra su integridad en este país, siendo el espacio donde mayormente ocurre, su casa, después cualquier otro lugar como el trabajo, la escuela, la calle y hasta en los negocios públicos. Son muchos los aspectos que intervienen en la violencia, así como también son muchas las razones que lo originan. Lo que sí es un hecho: en casa se educa y se pone el ejemplo.
Indudable que cuando las personas se enamoran pierden hasta la razón, cosa que hoy en día debe ser lo que más debemos cuidar, porque no es posible comprender a los hombres y a las mujeres cuando ven que durante la etapa del noviazgo la pareja se comporta de manera violenta, se ahí la importancia de ser como uno en verdad es y no cambiar, para que cuando venga el tiempo de vivir y compartir juntos, no haya impedimento o nada que obligue a decir, tanto de una parte como de la otra, no sabía que eras así.
Debemos educar en casa a los hijos e hijas a caminar, compartir y trabajar en un marco de igualdad y de respeto; de no hacerlo estaríamos creando niños y niñas con comportamientos y traumas que, a la larga, los harán perder todo, hasta su autoestima y por consecuencia, hasta su propia vida.
Buscar dentro de uno mismo es una etapa que se logra cuando se llega a la madurez, no podemos hacerlo y lograr un efecto positivo siendo pequeños, así que no se engañen los padres y las madres, todos conocen y saben cómo son sus hijos e hijas, no seamos alcahuetes de su mal carácter y comportamiento, eso va en detrimento de la familia y de la responsabilidad que tiene cada padre y madre de familia, en educar, formar y aportar a la sociedad, seres humanos con valores como la honestidad, solidaridad, justicia, respeto, igualdad amor
Cree en ti, sé cómo realmente eres, no busques, mujer, ser más o mejor o la más chingona, eso no vale cuando vives con un hombre que sabes te puede pegar, engañar, robar y hasta matar; si sabemos que a la pareja no le gusta el engaño, no engañemos, si sabemos qué le gusta y qué le disgusta, pues hagamos conforme a lo que consideremos sirva y nos apoye para ser felices; pero si también sabemos que es mujeriego, ladrón, mentiroso, abusivo y golpeador, qué puedes esperar. Las personas no cambian, sólo maduramos y más con las malas experiencias, así que no esperes a que una mujer o un hombre cambia, piensa mejor en si es posible transformar ese ambiente de violencia en un ambiente feliz y si no se puede, piénsalo, porque TE QUIERO VIVA.
Gracias a Dios por el trabajo, la familia, los amigos, la salud; gracias a usted estimado lector y lectora por su tiempo de lectura.
P.D. ¿Hay algo tan significativo para ti que incluso podría costar un peso, pero no lo venderías por cantidad alguna?