Los miembros del Consejo Indígena Popular de Guerrero-Emiliano Zapata fueron encontrados en un lugar cercano a un retén de Los Ardillos.
Redacción/Ultimátum
En la carretera de Atzacoloya del municipio de Chilapa de Álvarez, Guerrero, fueron hallados los cuerpos de Lorena Chantzin Paxacuasingo y Marcos Campos Ahuejote, miembros del Consejo Indígena y Popular de Guerrero-Emiliano Zapata (Cipog-EZ), cuyas desapariciones se reportaron el fin de semana pasado.
El Cipog-EZ explicó, a través de su cuenta oficial de Facebook, que ambos fueron encontrados en “un lugar donde el grupo de Los Ardillos tiene un retén, dedicándose a desaparecer y asesinar a miembros de las comunidades pertenecientes al consejo”.
“Sabemos que fueron Los Ardillos, Celso Ortega y la gente que integra al grupo narcoparamilitar, particularmente Audencio Lucas Rosario, quien está operando en la zona de Chilapa”, señaló.
Con el desplegado, los miembros reclamaron a las autoridades que se califiquen las muertes como un accidente “cuando se pueden observar marcas visibles de tortura y fueron localizados 24 horas después de su desaparición”.
Por ello, el Cipog-EZ exigió justicia para Lorena, de la comunidad de Xicotlán, y Marcos, de Ahuehuetlán, así como una investigación “objetiva y real” sobre lo sucedido por los tres niveles de gobierno, a quienes pidieron que dejen de ocultar y proteger a “los grupos narcoparamilitares”.