Eugenio Hernández Sasso
Este jueves la diputada federal panista Kathia María Bolio Pinelo señaló que Morena no debate sino más bien agrede a la oposición en el Congreso de la Unión, y, para variar, en el parlamento local de Tabasco el legislador Jorge Bracamontes (Morena) y Fabián Granier Calles (PRI) se enfrascaron en una discusión que casi termina en golpes.
Los diputados locales se sofocaron durante el debate de la “Ley Dedazo”. Ambos usaron la tribuna para argumentar a favor y en contra de esas normas que se han convertido en el tema de discusión en todas partes, porque niega a los tabasqueños el derecho a elegir a sus delegados municipales.
En un video que circuló en redes sociales se aprecia primeramente a Fabián Granier decir lo siguiente: “Les quiero recordar, a todos los diputados de Morena, y a todo el partido de Morena, que no todas las leyes son buenas, las leyes son perfectibles, lo que hicieron en la legislatura pasada, en este Congreso, fue una aberración, una aberración total, en contra de la democracia de todos los tabasqueños.
“Que quede claro, en el PRI no vamos a permitir que siga pasando lo mismo y que sigan queriendo hacer los ayuntamientos lo que quieren hacer con todas las delegaciones municipales. Se sienten sobrados. El PRI, cuando fue gobierno, probablemente ese fue uno de sus errores, uno de sus grandes errores ¡sentirse sobrado! Pero por eso perdimos y aprendimos. ¡Lo mismo están destinados ustedes, a fracasar y a perder!”
Entonces tocó el turno a Jorge Bracamonte y respondió: “Ahora resulta que quien ‘mapachiaba’ en una casa, en una oficina detrás de la Quinta Grijalva, donde imponían delegados, imponían diputados, ¡bueno!, quisieron imponer hasta gobernador; desde una casa en la que se ‘mapachiaba’ en la parte de atrás de la Quinta Grijalva, ahora resulta que nos va a venir a dar clases de democracia, de decencia, de participación ciudadana.
“Hablaba acerca de que se sentían sobrados; no, no estaban sobrados, eran los excesos los que lo mataron. Han ido a una radiodifusora a decir que son inocentes y se han cansado de decir que son inocentes; nadie se los ha creído, porque si se lo creyeran me tocó competir contra él y ahí están los resultados, cerca de 24 mil votos saqué yo, y creo que él sacó como 6 mil o 7 mil votos. La ciudadanía no les cree en lo más mínimo. Yo creo que van hacer una serie de Netflix: ‘Papá e hijo, presuntos inocentes’, a ver si así les creen”.
En ese tenor estaba la discusión en la tribuna, pero al final de la sesión se hicieron de palabras, ambos sacaron a relucir su inmadurez y estuvieron a punto de agarrarse a golpes, por lo que tuvieron que intervenir sus compañeros. Finalmente, Juan Álvarez Carrillo se llevó a Fabián y Rafael Elías Sánchez Cabrales a Jorge Bracamonte.
Alguien dijo una vez que la violencia solo se usa cuando se rebasa la inteligencias y es obvio que ambos legisladores demostraron que no tienen la capacidad de aguantar presión en el debate político y por esa razón se insultan y se retan a golpes como si estuvieran en un ring.