Clara y contundente
Alejandro Moguel/Ultimátum
La senadora Sasil de León Villard tiene muy clara la idea con respecto a seguir defendiendo los derechos de las mujeres, cuyo reconocimiento y garantías han costado mucho tiempo.
Por eso, ella rechaza, en forma contundente, una reforma constitucional, promovida en la Cámara de Diputados para acotar funciones del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y con la cual serían afectadas las acciones afirmativas consistentes en políticas públicas cuyo objetivo es compensar las condiciones que discriminan a ciertos grupos sociales del ejercicio de sus derechos, entre ellos el de las mujeres, la comunidad lésbico-gay, a grupos indígenas, entre otros.
La legisladora chiapaneca opinó que los promotores de esa reforma se olvidaron que éste es el Congreso más paritario de la historia de México con 251 mujeres diputadas y creyeron que ellas se iban a quedar calladas y que no iban a levantar la voz para defender todos esos temas que tantos años de lucha han costado conseguirlos.
Ella está de acuerdo en que legisladores y las legisladoras quiten al Tribunal atribuciones que no le corresponden, porque ha quedado demostrado que los magistrados se han excedido en algunas ocasiones, pero dejar a los partidos la facultad para decidir en cuestiones de paridad de género va en detrimento de la lucha histórica de las mujeres por el reconocimiento de sus derechos políticos.
Sasil de León celebró que las diputadas se hayan opuesto a esas modificaciones constitucionales y recordó que si por alguna razón el tema pasaba en la Cámara baja, las senadoras ya habían advertido que en la Cámara alta iba a ser rechazado, “porque nosotras no estamos dispuestas a dar un paso atrás en lo que se ha conseguido a favor del reconocimiento de los derechos de las mujeres. Sería incongruente y no iría de la mano con la Cuarta Transformación que está promoviendo el presidente, Andrés Manuel López Obrador”, apuntó. “Todavía hay asignaturas pendientes para las mujeres y nosotras no podíamos permitir que eso nos perjudicara”, aseguró.
LA OPOSICIÓN RECULÓ
Es importante recordar que esa modificación constitucional estaba siendo promovida por todas las fuerzas políticas del Congreso federal – PRI PAN, PRD, PVEM, PT, Morena y PES-, excepto Movimiento Ciudadano (MC). Pretende quitar algunas atribuciones a ese Tribunal y trasladárselas a los partidos para que sean sus dirigentes quienes decidan sobre los derechos de algunos grupos que tradicionalmente han sido marginados de la participación política. Rápidamente se entendió como un retroceso en los derechos políticos ganados por los grupos mencionados.
Gracias a la presión en redes sociales y en los medios de comunicación, por parte de periodistas, analistas y grupos feministas, la coalición Va por México, conformada por las bancadas del PRI, PAN y PRD, en San Lázaro, reculó y decidió no apoyar la iniciativa constitucional que buscaba limitar las atribuciones del TEPJF, pese a que desde un inicio fueron de los principales promotores de esta reforma.
Los primeros en bajarse del proyecto fueron los miembros de la bancada del PAN, quienes a través de un comunicado señalaron que “frente a las dudas e inquietudes de la sociedad civil y nuestra militancia, la dirigencia nacional, encabezada por Marko Cortés y Cecilia Patrón, así como el coordinador del Grupo Parlamentario, Jorge Romero, hemos decidido no acompañar la reforma electoral y posponer su discusión en parlamento abierto hasta después de la elección 2024”.
alexmoguels@hotmail.com
Discussion about this post