Fuego consumió locales

El incendio fue provocado por un corto circuito

Edgar Salazar/Ultimátum

CINTALAPA

Un posible corto circuito había provocado que dos locales co­merciales de la zona centro que eran ocupados por una tienda de abarrotes acabaran bajo las llamas, en un hecho ocurrido la mañana de este martes.

Un incendio de comercios provocó la intensa moviliza­ción de las corporaciones de Protección Civil, Policía Mu­nicipal, Bomberos y de los ser­vicios de pipas, a fin de poder controlar la deflagración y que los daños no fueran peores.

Pasadas las 05:00 horas, vecinos reportaron que del interior de la tienda La Can­delaria salían fuertes llamas que llegaban hacia la zona de banquetas, por lo que briga­distas atendieron el llamado, en donde primeramente des­alojaron a las personas que estaban cerca del incendio para posteriormente trabajar en el combate del mismo.

Las autoridades de segu­ridad y los cuerpos de emer­gencia trabajaron de manera coordinada para poder aca­bar con el fuego, el cual se había expandido sobre dos locales comerciales, y corría el riesgo de extenderse hacia otros sitios vecinos.

Una carnicería que se en­cuentra a un costado de la tien­da de abarrotes también fue al­canzada por las llamas, aunque la oportuna intervención de los bomberos evitó que el fuego causara mayores daños en este establecimiento de carne.

Luego de una intensa labor, de poco más de dos horas de trabajo, los bomberos, los bri­gadistas de PC y Policías Mu­nicipales pudieron acabar con el incendio, llevando a cabo los protocolos de verificación para garantizar que no hubiese al­guna brasa que pudieran volver a revivir las llamas.

Trascendió que todos los productos que habían al inte­rior de la tienda quedaron en cenizas, en un incendio que se presume fue por causa de un corto circuito, sin embargo ya corresponderá a las autori­dades del Ministerio Público ampliar las investigaciones sobre este hecho.

Es preciso mencionar que los dueños de los comercios de esta zona reconocieron la labor de las corporaciones y de los piperos, dejando en claro que su ayuda evitó que los da­ños pudieran ser catastróficos para muchos comerciantes.