No solo ha servido como un lugar de adoración, sino también como un punto de encuentro para aquellos que buscan comprender y abrazar esta antigua tradición religiosa
Juan Leyva/Ultimátum
TGZ
En el corazón de Tuxtla Gutiérrez, la capital del estado de Chiapas en México, se encuentra la singular Parroquia San Pascual Bailón, que es la única Parroquia Ortodoxa. Esta iglesia, dedicada al santo patrono San Pascual Bailón, se presenta como un testimonio de la tradición ortodoxa en una región donde esta fe no es tan común.
La historia de la Parroquia Ortodoxa “San Pascual Bailón” se remonta a finales del siglo XX, cuando un grupo de fieles seguidores de la Iglesia Ortodoxa decidió establecer un lugar de culto que reflejara sus creencias y valores espirituales. Inspirados por la figura carismática de San Pascual Bailón, conocido por su devoción y humildad, estos creyentes se propusieron honrarlo y difundir su mensaje de amor y servicio.
La construcción de la parroquia no fue tarea fácil. El pequeño grupo de feligreses se enfrentó a desafíos financieros y logísticos, pero su perseverancia y dedicación prevalecieron. Con el apoyo de la comunidad local y donaciones generosas, el sueño de tener una parroquia ortodoxa en Tuxtla Gutiérrez se hizo realidad. En el año 1995, la Parroquia Ortodoxa “San Pascual Bailón” abrió sus puertas en una emotiva ceremonia de consagración.
Desde su inauguración, la Parroquia Ortodoxa “San Pascual Bailón” ha sido un faro espiritual para los seguidores de la Iglesia Ortodoxa en Chiapas. No solo ha servido como un lugar de adoración, sino también como un punto de encuentro para aquellos que buscan comprender y abrazar esta antigua tradición religiosa. La parroquia ha organizado eventos culturales y educativos para difundir el conocimiento sobre el cristianismo ortodoxo y promover la tolerancia y el respeto interreligioso en la comunidad.
En un entorno mayoritariamente católico, la presencia de la Parroquia Ortodoxa “San Pascual Bailón” ha enriquecido la diversidad religiosa en Tuxtla Gutiérrez, alentando el diálogo interconfesional y fomentando el respeto por las diferentes creencias.
El 17 de mayo, cada año la ciudad de Tuxtla Gutiérrez se viste de fiesta y espiritualidad para celebrar la festividad de San Pascual Bailón. Esta emotiva celebración, reúne a miles de fieles ortodoxos y visitantes en una jornada llena de devoción, tradición y alegría.
Para los fieles ortodoxos de Tuxtla Gutiérrez, la festividad de San Pascual Bailón es un evento religioso en Tuxtla Gutiérrez, en el que se honra y se da gracias al santo por su intercesión y protección. Desde tempranas horas, los feligreses comienzan a llegar a la Parroquia San Pascual Bailón, un hermoso templo que se alza majestuosamente en el corazón de la ciudad, y que se convierte en el epicentro de la celebración.
La jornada festiva inicia con una procesión en la que se lleva en andas la imagen de San Pascual Bailón por las calles decoradas con flores y banderas. Los cánticos y oraciones resuenan en el aire mientras los devotos se unen en un acto de fe y agradecimiento por los milagros y bendiciones recibidas.
Además de los actos religiosos, la festividad de San Pascual Bailón también incluye diversas manifestaciones culturales y actividades recreativas que atraen a personas de todas las edades. Puestos de comida tradicional, juegos mecánicos, danzas folklóricas y eventos musicales forman parte de la alegría y la camaradería que se respira durante la celebración.
A lo largo de los años, la parroquia ha sido objeto de varias renovaciones y mejoras para mantener su esplendor y asegurar su preservación para las generaciones futuras. Además de ser un lugar de culto y plegaria, el templo también ha sido un centro activo en la vida comunitaria, acogiendo eventos culturales, sociales y educativos que fortalecen el sentido de identidad y pertenencia de los habitantes de Tuxtla Gutiérrez.
Hoy en día, la Parroquia Ortodoxa “San Pascual Bailón” continúa siendo el único lugar de culto ortodoxo en la ciudad de Tuxtla Gutiérrez. Su historia única y sentido de comunidad hacen de este templo un lugar especial para aquellos que buscan una conexión espiritual con raíces antiguas y un mensaje de paz y amor universales.