El objetivo de esta publicación es analizar las violencias por las que pasan las personas de este sector
Óscar Gómez/Ultimátum
SCLC
Se presentó en esta ciudad el libro Hechas a Mano: mujeres trans en tres contextos urbanos de Chiapas, lo cual es el resultado de un estudio realizado en tres ciudades de la entidad, por Irazú Gómez García, quién en entrevista comentó que la presentación fue en CIMSUR-UNAM, en María Adelina Flores 34-A del barrio de Guadalupe. “El objetivo de esta publicación es analizar las violencias por las que pasan las personas trans, por no adecuarse a la normatividad de género que conocemos, está investigación abarca tres ciudades, Tuxtla Gutiérrez, San Cristóbal de Las Casas y Comitán de Domínguez, la problemática que tienen las personas trans en estos lugares es muy fuerte, las protagonistas de este libro empezaron a sufrir violencia desde el ámbito educativo, siendo muy niñas”, comentó.
Asimismo, dijo que en las historias de vida que elaboró, cuentan cómo se les ha negado oportunidades de empleo, de vivienda, estudios básicos y múltiples circunstancias que han afectado su calidad de vida, “influye mucho la religión que marca un orden de género desde la biología, al no coincidir en los trans, el género y el sexo, la religión es uno de los problemas que generan pánico moral, dicen que no está bien, cuando en realidad todas las personas somos diversas”. “Entiendo que es un tema complicado porque no estamos acostumbrados de hablar de esto, aunque hay ahora más apertura, pero aún así cuesta trabajo y entender de que se trata, de que es importante entender que las personas somos diversas y debemos evitar situaciones de violencia que pueden llegar a crímenes de odio, tenemos el caso de los libros de texto y el debate que hay sobre tocar temas vinculados con la diversidad sexual”, agregó.
Finalmente, señaló que independiente del partido político que haya editado los libros y otras cuestiones es la primera vez que se tratan de introducir estos temas en los niveles básicos de educación, «esto tiene un fin, y no es pervertir a los estudiantes, orientarlos a qué les guste ciertas cosas o no, sino que se respete la diversidad y evitar que cuando crezcan promuevan conductas de odio hacia la diversidad, pero se debe promover una sociedad mejor, más tolerante y más humana».
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