Movimiento Ebrardista
Eugenio Hernández Sasso/Ultimátum
La formalización del Movimiento Ebrardista podría carcomer las fuerzas de Morena en la futura elección presidencial del 2024 y llevar a la derrota a Claudia Sheinbaum, o, en su defecto, existe el riesgo de debilitar al Frente Amplio por México (FAM) al llevarse votos de la clase media y sociedad civil que apoyan a Xóchitl Gálvez. Marcelo puede inclinar el fiel de la balanza.
De ahí que algunos consideren esta acción como una estrategia planeada desde el perverso cerebro del poder para dividir a quienes se han unido desde la oposición, con el propósito de abatir al que consideran el peor gobierno de la historia de México.
La batalla está en el campo. A un año de los comicios el presidente Andrés Manuel López Obrador ha hecho que se adelanten totalmente los tiempos y la guerra de todos contra todos está en total ebullición.
Cuando se conoce la forma de pensar del hombre que llevó a la izquierda a la Presidencia de la República por primera vez en la historia de México, se puede deducir que entre Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard se acabó la hermandad ¡Dejaron de ser carnales!
López Obrador no le perdona a nadie, ni a sus hermanos de sangre, que lo contradigan. Es una de las características de su autoritarismo y no tendría por qué ser diferente con el ex canciller mexicano que evidenció el cochinero de su emblemático proceso.
Si Marcelo Ebrard dice que su permanencia en Morena depende de si el partido corrige las irregularidades en el proceso interno, es mejor que desde este momento prepare su equipaje y planee su futuro desde otra trinchera porque no habrá vuelta de hoja: la coordinadora de defensa de la 4T y próxima candidata a la presidencia de México se llama Claudia Sheinbaum por decreto de López Obrador. Nunca va a recular.
El “carnal” Marcelo lo sabe y por eso ha revelado que el 18 de septiembre lanzará un “movimiento político nacional”. Habría que ver si se trata de la creación de un nuevo partido o de la posible alianza con la oposición para dar certeza al FAM de triunfar en el 2024. Como dijo José Atila Morales, ex diputado de Morena en Tabasco, “si te trata mal tu mujer, pues te vas con tu querida”.
Ayer, Marcelo Ebrard se reunió con legisladores y su estructura nacional en un hotel de la Ciudad de México. La nueva organización que presume lanzar al terreno político nacional aglutina a por lo menos medio millón de voluntarios, 200 legisladores locales y federales, así como a ex funcionarios de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
El domingo por la noche impugnó el proceso de selección de la Coordinación Nacional de Defensa de la 4T, que estuvo, según Marcelo, lleno de irregularidades e ilegitimidad que llevaron al triunfo a Claudia Sheinbaum, en una franca imposición. Por eso pidió que se anule y se reponga el proceso, cosa que si no es imposible sí está totalmente difícil.
SASSÓN
Si el presidente López Obrador de verdad cree que Javier May es todo lo que dijo en la conferencia mañanera cuando renunció a Fonatur, entonces no lo mandó a que cayera directo al precipicio. Con seguridad, en Tabasco el candidato de Morena a la gubernatura en 2024 será hombre. A partir de ahí los chiapanecos hagan sus apuestas.
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