A dos semanas del arranque de campaña por la primera magistratura del país, la diferencia entre ambas contrincantes se ha reducido a 9.2 por ciento.
✍🏽Eugenio Hernández Sasso
La encuesta de Massive Caller, publicada el 14 de marzo, señala que si en este momento se llevarán a cabo las elecciones para la Presidencia de la República, Claudia Sheinbaum Pardo ganaría con 43 por ciento de la preferencia electoral, sobre 33.8 por ciento de Xóchitl Gálvez Ruiz.
Esto indica que, a dos semanas del arranque de campaña por la primera magistratura del país, la diferencia entre ambas contrincantes se ha reducido a 9.2 por ciento, sin embargo, todavía faltan 10 semanas de actividades proselitistas que podrían mover el marcador.
El mismo sondeo de opinión revela que 19.8 por ciento de los electores aún no se decide por quién va a votar el 2 de junio del presente año. Entonces, dependerá de la audacia de cualquiera de las dos aspirantes a la silla presidencial, para convencer a la mayor cantidad de mexicanos y mexicanas a que se sumen a su proyecto.
En ese sentido, el discurso es muy importante, ya que mientras Claudia Sheinbaum está acotada y no puede salirse del libreto de la continuidad de la cuarta transformación que no es bien vista por la clase media, Xóchitl Gálvez transita con total libertad, dueña de sus propuestas y, al parecer, empieza a despertar la esperanza de la ciudadanía.
Las limitaciones que Claudia Sheinbaum tiene para hilvanar un discurso propio, acorde con la realidad el país, la pueden descarrilar en cualquier momento, sobre todo porque no puede hablar de la delincuencia que flagela a millones de familias.
Hay demasiadas cosas por las que los mexicanos están hartos del actual régimen, eso lo saben muy bien tanto Claudia Sheinbaum como Xóchitl Gálvez, la diferencia es que la candidata de Fuerza y Corazón sí puede hablar y proponer soluciones a estos asuntos, en tanto que la abanderada de la alianza oficial está vedada y, salirse del guion, implicaría contradecir a quien le coordina la campaña desde palacio nacional.
En materia de seguridad, por ejemplo, Sheinbaum no puede ofrecer otra cosa más que la persistencia de los abrazos a los criminales que tienen muertos de miedo a los habitantes del país. Hacer lo contrario sería reconocer que la estrategia de López Obrador ha fallado. Eso podría causarle antipatía con el huésped de la silla embrujada, pero a la vez también le causa animadversión con los ciudadanos. He ahí el dilema.
Sin embargo, están confiados en que ganarán porque cuentan con todo el poder político y económico del Estado. Operan con la presión de los programas sociales, igual como lo hacía el viejo sistema, aunque éste sea un delito grave.
De acuerdo a la Ley, “Se impondrá de trescientos a seiscientos días multa y prisión de cuatro a nueve años a quien, utilizando bienes, fondos, servicios o beneficios relacionados con programas sociales, ejerza cualquier tipo de presión sobre el electorado para votar o abstenerse de votar por una o un candidato, partido político o coalición…”
Pareciera que tienen el control de quienes están matriculados en estos apoyos, pero la realidad es que la gente empieza a hartarse y razonar su voto, porque al final de cuentas sabe que López Obrador ya se va de la presidencia y quien llegue, sea del partido que sea, tendrá que seguirlos beneficiando. Eso no ha cambiado en ningún gobierno.
Otro asunto que ha causado disgusto a la gente son algunas obras emblemáticas de este gobierno, esas que han costado miles de millones de pesos, pero se perfilan para convertirse en elefantes blancos sin ningún beneficio para el pueblo sabio.
Este sábado Claudia Sheinbaum acompañará a Javier May, candidato de Morena al gobierno del estado de Tabasco, a su arranque de campaña. El primer evento se realizará en el parque central Venustiano Carranza de Paraíso, Tabasco, a las 10 de la mañana.
Ahí se ha construido la refinería Olmeca de Dos Bocas que ya se inauguró desde el 1 de julio de 2022, pero es la hora en que no refina ni un litro de gasolina, combustible que, por cierto, cada día está más caro y la candidata oficial asegura que ya se acabaron los gasolinazos.
Ahí tendrá que presumir algo que en realidad no ha funcionado, pero, como señalamos anteriormente, no puede salirse del esquema que le tienen marcado, aunque electoralmente no le beneficie mucho.
SASSÓN
En Chiapas cada vez se consolida más la unidad de los diferentes actores políticos en torno al candidato de Sigamos Haciendo Historia al gobierno del estado, Eduardo Ramírez Aguilar. No les queda de otra. Se augura un triunfo contundente del Jaguar Negro para el 2 de junio próximo.
Sasso89@hotmail.com