Queda comprobado que Dante Delgado, su partido Movimiento Ciudadano (MC) y su candidato presidencial Jorge Álvarez Máynez son esquiroles de Morena.
✍🏽Eugenio Hernández Sasso
Queda comprobado que Dante Delgado, su partido Movimiento Ciudadano (MC) y su candidato presidencial Jorge Álvarez Máynez son esquiroles de Morena. Estos le están haciendo “la chamba” al partido oficial para que la oposición no se fortalezca, con el propósito de evitar una victoria contundente de Xóchitl Gálvez el 2 de junio.
El debate político, en pleno proceso electoral, se tornó bastante interesante cuando Máynez (mejor conocido como el candidato “Naiden”) había pedido como condición, para negociar su declinación en favor de Xóchitl Gálvez, la renuncia de Alejandro “Alito” Moreno y Marko Cortés, a las presidencias del PRI y PAN, así como a sus respectivas candidaturas plurinominales al Senado de la República.
Propuso también que se nombrara, en el caso del PRI, a Beatriz Paredes como dirigente nacional y entonces procedería a dialogar con ella.
Sin embargo, el candidato “Naiden”, que se encuentra en el sótano de la contienda comicial, en un indiscutible tercer lugar, nunca se esperó la respuesta de un viejo lobo que, inclusive, se ha enfrentado a la persecución del régimen obradorista en este sexenio, como Alito Moreno.
El presidente nacional de PRI le respondió que renunciaría a la dirigencia del partido y a su candidatura para senador, si antes del 19 de mayo el candidato de Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Máynez, declinaba a favor de Xóchitl Gálvez.
La oferta incluía la cesión de 9 millones de spots para radio y televisión que le restan al partido de Movimiento Ciudadano (MC), de aquí al final de la campaña, para pedir el voto útil a favor de la candidata de la coalición Fuerza y Corazón por México.
Con esos recursos mediáticos, según el líder priista, podrían ganar la elección con una diferencia contundente, superior a cinco puntos porcentuales, para que no quedara ninguna duda de la victoria de Xóchitl Gálvez el 2 de junio.
De ahí se derivó otra endeble respuesta de Álvarez Máynez y la intervención del dirigente de Morena, Mario Delgado, quien con su ataque a Alito Moreno confirmó que la oposición de MC al partido oficial es de mentiras y la alianza con el poder es de verdad.
En realidad, el candidato naranja no tiene nada que perder, quien tiene mucho que ganar es el dirigente de ese partido esquirol, Dante Delgado, porque sabe que con el 6 o 7 por ciento que alcance de la votación total, obtendrá algunas curules plurinominales en el Congreso de la Unión para negociar con la alianza ganadora.
De hecho, Alejandro Moreno sí tenía mucho qué perder al ofrecer su renuncia a la dirigencia nacional de su partido, así como a la senaduría plurinominal que prácticamente tiene ganada, pero evidenció que no le importaba el sacrificio, siempre y cuando fuera por el bien del país y de todos sus habitantes, porque en esta elección lo que está en juego es la libertad democrática o la dictadura. No hay de otra.
Votar por los mismos para la Presidencia de la República este 2 de junio es hacerlo por la incompetencia. El sexenio actual fue de un gobierno fallido en todo. Los indicadores, en general, patentizan la falta de desarrollo económico, el nulo crecimiento, la galopante inseguridad, el fracaso en salud y educación, debido a la incapacidad de Morena para dar resultados.
Dante Delgado le apuesta a que su partido Movimiento Ciudadano crezca y sea una opción para el 2030 con Luis Donaldo Colosio Riojas, sin embargo, el alcalde de Monterrey con licencia, en reiteradas ocasiones, ha sugerido el voto útil para Xóchitl Gálvez, porque sabe perfectamente lo que está en juego en esta jornada electoral del 2 de junio.
“Debemos entender que no se trata de nosotros, sino de la gente y de cómo servir mejor… debemos recordar algo fundamental, nuestro México es mucho más grande que cualquier partido y eso lo tienen que entender, primero que nadie, quienes forman parte de los partidos o bien quienes estamos cerca de uno”, ha expresado el hijo del malogrado candidato presidencial Luis Donaldo Colosio Murrieta.
Con sus acciones, Dante Delgado ha estirado la liga al máximo y, muy probablemente, podría quedarse como el perro de las dos tortas para dentro de seis años, al igual que ahora se encuentra el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), en peligro de extinción en el país.
SASSÓN
México vive en una transición estancada y una democracia fallida. La alternancia en el poder debería llevarse a cabo, sin sobresaltos, cuando un mal gobierno concluye, sea del partido que sea. Sin embargo, el fantasma de los fraudes electorales y la sombra de la presencia criminal en los procesos electorales es una realidad tangible. Este es el mayor desafío que los mexicanos deben derrotar con la poderosísima arma de su credencial de elector, para ametrallar con sufragios a los cínicos, corruptos y mentirosos gobernantes el próximo 2 de junio.
Sasso89@hotmail.com