Quienes no saben por quién votar, regularmente favorecen a la oposición; hace un mes se hizo una encuesta en la capital chiapaneca, en la que el 60 por ciento no respondió, dijo Emilio Salazar.
✍?Eugenio Hernández Sasso
Emilio Salazar Farías, candidato de la coalición Fuerza y Corazón por México a diputado federal por el Distrito 9 de Chiapas, afirmó que las elecciones para la Presidencia de la República serán cerradas, al igual que para Tuxtla Gutiérrez.
Entrevistado por Amet Samayoa Arce, director general del diario Ultimátum, y los analistas políticos Javier Guízar y Alejandro Moguel, Emilio Salazar consideró que la elección a la Presidencia de la República está cerrada, porque si fuera cierta la ventaja de 30 puntos a favor de la candidata oficial seguramente no estaría haciendo campaña.
Respecto a la contienda por la alcaldía de Tuxtla Gutiérrez, afirmó que en 2015 Paco Rojas ganó la elección, pero se perdió en los tribunales.
En 2018, añadió, eran otras circunstancias y en el 2021 cometieron el grave error, como tuxtlecos, de dividirse.
“Pero eso no podría ser criticable, porque quien critica eso criticaría a López Obrador que lo intentó muchas veces. Debo reconocer que Paco tiene una gran presencia en un sector de la sociedad, si no es que en todos”, precisó.
Es un fenómeno mediático, agregó, tiene una energía envidiable y es querido por la gente porque tiene un buen recuerdo de su administración.
Subrayó que Ángel Torres viene de ser secretario de Obras Públicas y ninguno de los dos puede garantizar que ya ganó la elección. “Va a ser una carrera parejera” en la que decidirá la sociedad.
Explicó que quienes no contestan o no saben por quién votar, regularmente favorecen a la oposición y dijo que hace un mes se hizo una encuesta en Tuxtla, donde el 60 por ciento no respondió.
Aunque actualmente fueran el 30 o el 20 por ciento, esos definirían la elección, agregó.
Reveló que siente el nerviosismo natural de ser oposición, porque siempre puede venir la cargada del poder, aunque confió en que tiene los mejores números en los sondeos de opinión.
Recalcó que no cree en los cierres masivos de campaña, porque regularmente los mismos que asisten a un mitin son los que acuden a otro “y eso es engañarse solo”.
Comentó que el arraigo es importante, porque él es una persona que vive en Tuxtla y ha invertido en diferentes partes de su estado, en tanto que su adversario habita en la Ciudad de México.
Manifestó que hay uno de sus contrincantes que antes llamaba ladrones, bandidos y asesinos a quienes ahora le levantan la mano en los mítines políticos, con su chaleco puesto para que lo identifiquen.
De llegar nuevamente a la Cámara de Diputados federal, indicó que inicialmente revisaría quienes son los otros 499 legisladores, impulsaría su propia agenda y vería quiénes serían sus aliados para hacerlo.
Asimismo, dijo que examinaría cuales son los factores de poder en su bancada, para incidir, mediante un trabajo de relaciones públicas permanente, en las comisiones de las cuales quiera formar parte.
Indicó que los números de todas las encuestas señalan que está arriba y en sus recorridos ha detectado que la aceptación de la alianza ha sido favorable porque la gente quiere equilibrios en la Cámara de Diputados.
Consideró que Eduardo Ramírez es un gran candidato que trae muy buenos números para la gubernatura, pero en el Congreso van a prevalecer los equilibrios.
Al hablar de su padre, señaló que no es lo que él dice, “pero él tampoco es quien era. Hoy su mente está extraviada en laberintos que no conozco y que seguramente con la edad llegaré a conocer; no lo juzgo, yo lo quiero mucho, lo amo mucho, adoro a mi padre, quisiera darle un beso, sin duda, pero ¿qué hago ante una enfermedad? Debo de tener mucha tolerancia y hacerme a la idea de (ser) huérfano de papá vivo”.
Manifestó, sin embargo, que hay algunos oficiosos que andan calentando el ambiente por interés o ganas de molestar, pero pidió a Dios su bendición para quienes lo critican y para su padre.
Para quienes lo apoyan recomendó que revisen primero su estatura moral, porque si no es tan grande como ellos dicen deben tener cuidado, “no les vaya a pegar uno que es más alto moralmente que ellos”.
Agradeció también el mensaje que emitió su madre para pedir el voto a su favor.
Indicó que todos quieren ser senadores porque duran seis años, pero la Cámara de Diputados tiene un componente fundamental de control para un presidente, porque es la única que califica el presupuesto.
Por ello, recalcó, debe haber equilibrio en la cámara baja, por el bien del país.
Consideró que el estado de Veracruz se le ha complicado a Morena, al igual que Morelos y Jalisco, aunque Chiapas y Tabasco está definido en la gubernatura, pero en los congresos habrá sorpresas.
“El reto no estará fácil para ninguno”, expresó.
Su agenda, en estos días previos a la elección, destacó que será una caminata este miércoles, y el jueves “como lo hago todos los días, encomendarme a Dios para que me cuide y me acompañe”.
Quienes no saben por quién votar, regularmente favorecen a la oposición; hace un mes se hizo una encuesta en la capital chiapaneca, en la que el 60 por ciento no respondió, dijo Emilio Salazar
