Los adversarios de Alito no pudieron hacer nada para doblarlo ni impedir que permaneciera en la dirigencia nacional.
✍?DEMOCRACIA VIRTUAL | Eugenio Hernández Sasso
La victoria de Alejandro Moreno Cárdenas y Carolina Viggiano como presidente y secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI, respectivamente, simboliza una nueva etapa para el tricolor que pretende abrir las puertas a nuevos militantes, con visión de futuro, y cerrar el acceso a todos aquellos que durante muchos años se esmeraron en acabar con ese partido mediante prácticas de corrupción y autoritarismo.
Durante casi ocho décadas, los mismos de siempre se repartieron cargos de elección popular, ocuparon el gobierno y se distribuyeron el poder (y la riqueza nacional) entre familiares, amigos y compadres.
Eso causó que el Partido Revolucionario Institucional se desprestigiara, y la oposición, representada entonces por Andrés Manuel López Obrador, aprovechara para generarle una imagen que al final lo llevó a la agonía y el descalabro electoral.
Los priistas confían en Alejandro Moreno y por eso le manifestaron todo su respaldo en la sesión del Consejo Político Nacional celebrada este domingo, donde arrasó con un 97 por ciento de la totalidad de los sufragios.
La votación se llevó a cabo en el auditorio Plutarco Elías Calles, en urnas transparentes, para que no hubiera forma de decir que las cosas se hicieron en lo oscurito.
Además, para darle mayor certeza a la jornada, en ese recinto estuvieron presentes más de 25 personalidades de diferentes países, quienes solicitaron estar presentes para verificar que la elección de presidente y secretaria(o) general del PRI se llevara a cabo con total legalidad, a la vista de todos.
Alito Moreno anunció, en su discurso, que nuevamente le darán su lugar de respeto a los sectores campesino, popular, obrero, al organismo de mujeres y al de jóvenes del PRI, así como a los seccionales que, por cierto, los dinosaurios que ahora están inconformes dejaron olvidados.
El nuevo proyecto que plantea el ex gobernador de Campeche para fortalecer a su instituto político tiene futuro, porque desde este momento empezarán a trabajar con estrategia, capacidad y planificación, para enfrentar el desafío que representa el proceso electoral intermedio de 2027.
Para hacer realidad la reforma interna que pretenden, se instalarán las comisiones de Análisis Cualitativo y Cuantitativo, de Diagnóstico Electoral, de Comunicación, de Diálogo con la Militancia, para la Reflexión con Expertos, y de Consulta con la Sociedad Civil.
Alito es un campechano que viene desde ser seccional, consejero político municipal, consejero político estatal, presidente del Comité Directivo Municipal (CDM) y del Comité Directivo Estatal (CDE) de Juventud Popular de la CNOP, líder estatal de ese partido en su estado y presidente del CDM del Frente Juvenil Revolucionario también en la entidad.
A nivel nacional, antes de ser presidente del CEN, fue consejero político, ocupó las secretarías de Organización, así como la de Operación Política, y fue líder del Frente Juvenil Revolucionario (FJR).
Por eso conoce el trabajo de base, ha caminado por todo el país, ha gastado suela haciendo trabajo de territorio y esa será la nueva dinámica que iniciará a partir de ahora.
La finalidad es convencer a todos aquellos mexicanos que están inconformes por el mal desempeño del gobierno de Morena y volverlos al partido que creó las instituciones del país y por muchos años impulsó el desarrollo y la prosperidad.
Ante la situación que pueda presentarse en la siguiente administración presidencial, Alejandro Moreno advirtió que “el PRI será un feroz opositor”.
Reconoció que su partido se encuentra en la posición más precaria de su historia, sin embargo, “no podemos, ni debemos sucumbir al fatalismo, ni a los ataques, ni a los malos augurios de quienes, por años, han deseado ver al PRI tocar el fondo del abismo”.
A partir de ahora, se verá el trabajo de un Comité Ejecutivo Nacional que hará las cosas con los pies bien plantados en el presente y la vista alzada al futuro, porque en los últimos cuatro años se han sentado las bases para despegar y recuperar la fuerza de ese instituto político.
De igual manera, en ese propósito de convertirse en una tenaz oposición del régimen, Alito Moreno dijo que respaldarán totalmente a ministros, magistrados, jueces, trabajadoras y trabajadores del Poder Judicial, ya que este gobierno los quiere politizar las designaciones y desaparecer la carrera judicial que es tan importante para garantizar el Estado de Derecho y el acceso a la justicia.
Por ello, desde las cámaras de Senadores y de Diputados el PRI no apoyará reforma alguna al Poder Judicial, que busque mermar su independencia y debilitarlo frente al resto de los poderes constituidos.
“El PRI no va a acompañar ninguna asonada en contra de nuestro sistema de pesos y contrapesos institucionales”, puntualizó.
Rechazó también la sobrerrepresentación de los partidos oficialistas en el Congreso de la Unión, y se pronunció por la asignación de escaños y curules que refleje con mayor fidelidad la voluntad popular depositada en las fuerzas políticas.
SASSÓN
Los adversarios de Alito no pudieron hacer nada para doblarlo ni impedir que permaneciera en la dirigencia nacional. Ahora viene una nueva etapa dentro del Revolucionario Institucional, en la que las nuevas generaciones empezarán a ser tomadas en cuenta.
Sasso89@hotmail.com
