Se puede ir satisfecho, cumplió con su deber y deja a la capital chiapaneca en orden, limpia y con buenas cuentas.
✍?MOLINOS DE VIENTO | Susana Solís
El alcalde de Tuxtla Gutiérrez, Carlos Morales Vázquez, se puede ir satisfecho, cumplió con su deber y deja a la capital chiapaneca en orden, limpia y con buenas cuentas.
Hace seis años, Carlos Morales recibió una ciudad destrozada, con las arcas saqueadas y problemas por doquier. Aplicó mano dura para reordenar primero al interior del Ayuntamiento lo que significó críticas, golpes bajos, reclamos que tuvo que apechugar. Al final, logró adelgazar la burocracia, generar ahorros, pagar la deuda heredada y comenzar a trabajar por la ciudad.
No fue gratuito que lograra su reelección ante una ciudadanía crítica que reconoce que ahora hay una ciudad más limpia, iluminada, que llega con más fuerza el agua, que son cada vez menos las colonias que sufren inundaciones. Una ciudadanía que observa a los trabajadores del ayuntamiento podando árboles casi todo el año, pintando guarniciones, destapando coladeras, reparando tuberías; obras aquí y allá que por momentos molestan a los conductores pero que a la larga, ha traído beneficios.
Pero sin duda, el mayor éxito de Carlos Morales es la recuperación del río Sabinal, el principal afluente donde se bañaron nuestros padres ya fallecidos y donde hoy vuelve a correr el agua limpia. Hasta hoy, no conozco o escuchado de algún otro sitio en Chiapas o en México que haya logrado sanear un cauce como se logró en Tuxtla Gutiérrez.
Quedan pendientes, pero Morales Vázquez, entre la gente común, la de a pie, la tuxtlecada, será bien recordado.
MORENA: EXPERIENCIA Y JUVENTUD
El chiapaneco Emilio Ulloa Pérez, activista, luchador social, fundador de la izquierda mexicana, podría acompañar en la Secretaría General de Morena a Luis María Alcalde que se perfila para dirigir los destinos de ese partido. Una dupla interesante que conjugaría juventud con experiencia; un ingrediente necesario para hacer crecer a Morena y que en síntesis podría devolver la dignidad a los fundadores y por el otro abrir la puerta al relevo generacional.
Ulloa Pérez, nació en Tapachula, pero su niñez y adolescencia la vivió en el ejido Tierra y Libertad del municipio de Jiquipilas, Chiapas y cuya vivencia le inspiró a escribir el libro “Añoranzas de la tierra, voces por la libertad”.
Emilio Ulloa, diputado local y tres veces diputado federal, es de la vieja guardia de la izquierda mexicana que lucharon genuinamente para cambiar el país sin pretensiones materialistas y económicas que ahora inspiran a muchos a meterse a la política.
El activista acompañó al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas en la lucha democrática que dio origen al PRD y es también uno de los fundadores de Morena. Cuenta con amplio respaldo de varias generaciones de militantes de izquierda y se espera que en los siguientes días salga humo blanco en Morena y asuma la Secretaría General de ese partido.
Hay que recordar que la familia Ulloa ha dado varios políticos de izquierda que han hecho historia en Chiapas y Emilio que ha realizado un intenso trabajo en el Estado de México, concretamente en Nezahualcóyotl.
Un chiapaneco más a las grandes ligas, no hay que perderlo de vista.
That´s All.
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