Quien diga lo contrario estará faltando notoriamente a la objetividad y estará siendo deshonesto consigo mismo.
✍?ACÁ ENTRE NOS | Alejandro Moguel
Tuxtla Gutiérrez es hoy una mejor ciudad que hace seis años. Quien diga lo contrario estará faltando notoriamente a la objetividad y estará siendo deshonesto consigo mismo.
El saneamiento de las finanzas públicas que estaban en quiebra total, el rescate del Río Sabinal y el fortalecimiento de los principales servicios públicos: alumbrado, pavimentación, limpia y suministro de agua potable, están considerados como los principales aportes de la administración de Carlos Morales Vázquez, la cual se extendió a seis años, por la posibilidad de la reelección en 2021.
Los servicios públicos están a la vista de todos: una ciudad mucho más iluminada que como estaba esta urbe hace seis años; una más óptima recolección de basura que ha dejado a una ciudad capital más limpia y menos propicia a sufrir inundaciones; y hubo más agua potable en los hogares tuxtlecos.
El propio alcalde lo dijo: practicó un gobierno diferente, colocó la política al servicio de la ciudadanía, logró avances significativos en limpieza, recuperación de espacios públicos y las finanzas públicas.
El ayuntamiento puso en marcha cinco acciones clave para dar al Río Sabinal un aspecto limpio y libre de contaminación. Alrededor de 40 mil hogares dejaron de descargar sus aguas negras en dicho afluente y eso liberó a miles de familias vecinas al afluente de la pestilencia y de riesgos de padecer enfermedades gastrointestinales o respiratorias.
A las márgenes del Sabinal y a toda la ciudad capital de Chiapas, Carlos Morales Vázquez le proporcionó sustentabilidad, ese término que casi nadie comprende en su totalidad.
Sin embargo, vale la pena explicarlo. Sustentabilidad refiere a la administración eficiente y racional de los recursos públicos, para mejorar el bienestar de la población actual sin comprometer la calidad de vida de las generaciones futuras. De ahí, se desprende que lo hecho por una autoridad, en todos los rubros, sea amigable con el medio ambiente. Eso no tiene precio.
Porque se han sentado las bases para que las próximas generaciones humanas puedan desarrollarse en un ambiente óptimo, y valdrá la pena que las próximas autoridades municipales y estatales continúen esas prácticas oficiales, en beneficio de las actuales y futuras generaciones.
Morales Vázquez destacó el programa de reforestación que permitió plantar 70,000 árboles en áreas urbanas, alcanzando un 75% de supervivencia. Eso fue una realidad incuestionable, porque ha quedado soportada por organizaciones internacionales como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) y la propia ONU cuyos representantes reconocieron a Tuxtla Gutiérrez como “Ciudad Árbol del Mundo” por su esfuerzo en la gestión del arbolado urbano
Asimismo, se implementó un programa integral de recolección de pilas, aceites y aparatos electrónicos, con cuyas acciones se evitó la contaminación del suelo y el agua, y se fortaleció la cultura del manejo responsable de residuos.
Creo innecesario repetir los números de las finanzas públicas tuxtlecas, pero todo lo realizado en los recientes dos trienios colocan a Carlos Morales Vázquez como el mejor presidente que Tuxtla Gutiérrez ha tenido en los recientes 24 años, por lo menos.
POSDATA
Tristeza y frustración entre los padres, familiares y compañeros de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos hace diez años. Ellos fueron los más engañados por el presidente, López Obrador. Todos los mexicanos nos dimos cuenta que, en forma irresponsable, el entonces candidato a la presidencia les prometió que encontraría a los muchachos desaparecidos. Por supuesto, nunca los encontró. Los aludidos están furiosos.
alexmoguels@hotmail.com