Promesa que parecería arrogante para algunos, ante el rezago ancestral de Chiapas, pero a nuestro parecer no imposible de lograr.
✍🏽BALANZA LEGAL | Rodolfo L. Chanona
En la ciudad de Comitán de Domínguez, el futuro Gobernador Eduardo Ramírez Aguilar, dentro del marco de la presentación de parte de su gabinete, realizó el compromiso para el 08 de diciembre del año 2025, de levantar la bandera blanca del abatimiento del analfabetismo en nuestra entidad.
Promesa que parecería arrogante para algunos, ante el rezago ancestral de Chiapas, pero a nuestro parecer no imposible de lograr; siempre y cuando, se cree un programa de alfabetización funcional y excepcional que atienda las características propias de nuestra entidad, el cual, deberá ser dirigido a los adultos de las regiones rurales e indígenas y a los jóvenes no escolarizados, sacando provecho a las tecnologías de la información y comunicación (Tics).
Según los últimos datos aportados por el INEGI (2020), el universo de personas a la cual, se enfrentará el próximo gobierno, corresponde a una población de 15 años y más de 3,745,908 de la cual 3,229,576 es alfabeta, 512,720 analfabeta y 3,612 no está especificada, lo que es equivalente al 13.7% del analfabetismo a nivel nacional.
Cifra que nos permite suponer, la posibilidad de lograr el objetivo, considerando que, sí en los años 60, los cubanos lograron abatirlo en tan solo tres años, con mayores limitaciones y recursos de los que se cuentan ahora, y su universo de analfabetas era en ese entonces de 1,032,849 no habría porque Chiapas, no poder lograrlo en un año; además de haber señalado ERA que, no escatimará recursos para lograrlo.
Los programas de alfabetización más destacados del mundo actualmente, han sido diseñados en la lengua materna, así como, han generado el acceso a miles de libros electrónicos gratuitos y contenidos educativos adaptados a los planes de estudios en los idiomas locales, diseñándose herramientas digitales para proporcionar aprendizaje híbrido en las comunidades marginadas.
Fomentando la cultura de la lectura en el hogar, proporcionando a las comunidades de bajos ingresos, una amplia gama de libros, para que sean capaces de construir su propia biblioteca en casa, dotando también, a las personas con discapacidad de las regiones rurales, de los conocimientos básicos de lectoescritura, así como, impulsando en las regiones, diálogos integradores para lograr comunidades pacíficas, capacitándolas para que puedan expresar sus puntos de vista.
Los cuales, se han apoyado de distintos recursos, como es el caso de aulas móviles y a distancia, con un entorno de aprendizaje lo más próximo posible a los educandos; favoreciendo el desarrollo escolar y personal que les permita hacer frente a los obstáculos económicos, sociales y psicológicos de la educación, proporcionando competencias digitales esenciales.
Lo ha expresado en reiteradas ocasiones Ramírez Aguilar: “La educación representa para cualquier sector de la sociedad, mejores oportunidades de desarrollo personal y socioeconómico, y para los grupos marginados, marca la diferencia entre una vida de exclusión o una subsistencia sana y sostenible”.
Chiapas merece, se reivindique eficazmente el derecho a la educación que prescribe el artículo 3º. Constitucional, abatiendo el rezago educativo que de manera histórica ha tenido, siempre bajo la justificación del contexto marginal de su población, la dispersión de las localidades y el difícil acceso a ellas por las características de las vías de comunicación.
Al día de hoy, ya se han presentado los cuadros que les tocará acompañar al Gobernador, coordinando a las distintas instancias gubernamentales que deberán participar, para llegar a buen puerto y cumplir con la encomienda, en donde encontramos perfiles profesionales con experiencia en el campo educativo, como es Roger Mandujano Ayala en su calidad de Secretario de Educación, Gilberto de los Santos Cruz como Subsecretario de Educación Estatal y José Alfredo Ramírez Guzmán como Subsecretario de Educación Federalizada, entre otros; quienes han tenido diversas reuniones con diversos actores de la entidad, presentándoles datos claves sobre el rezago educativo, aún que hasta el momento, no se conoce con exactitud la metodología que se implementará.
La cruzada para revertir el analfabetismo “Chiapas Puede”, coadyuvará en el combate al rezago educativo, pero también, permitirá combatir la desigualdad social, logrando una sociedad más justa y equitativa. Esperamos tenga éxito este programa alfabetizador propuesto por ERA, el cual, indudablemente redundará en beneficio de la entidad y de la sociedad chiapaneca.