“Los usos y costumbres no pueden contraponerse al orden jurídico vigente”, sostuvo la Fiscalía.
Carlos Trujillo/Ultimátum
La Fiscalía General del Estado (FGE) investiga el caso del encarcelamiento de menores de edad junto con sus padres en la comunidad de Polhó, municipio de Chenalhó, presuntamente por conflictos comunitarios y bajo el argumento de los llamados “usos y costumbres”.
La denuncia circuló inicialmente en redes sociales, lo que activó a las autoridades estatales. La FGE confirmó que las víctimas ya fueron liberadas y se encuentran en buen estado de salud, además de que se emitieron medidas de protección y cautelares para salvaguardar su integridad.
La Fiscalía de Justicia Indígena continuará con las indagatorias para deslindar responsabilidades, subrayando que ninguna práctica comunitaria puede estar por encima del marco jurídico vigente, y que cualquier acto que atente contra la dignidad e integridad de las personas es inadmisible.
La liberación de la familia se logró con la intervención del presidente municipal de Chenalhó y de la Delegación de Gobierno, en un esfuerzo coordinado para resolver el conflicto sin poner en riesgo a los menores.
La FGE reafirmó su compromiso con el respeto a los derechos humanos y destacó que el interés superior de la niñez debe prevalecer en todo momento.
