Señalan a SMAPA como caja chica del alcalde Ángel Torres; regidor Francisco Rojas denuncia desvío de recursos y cuestiona designación de operador tabasqueño como titular del organismo en Tuxtla.
TAROT POLÍTICO /Amet Samayoa Arce
Considerado como la caja chica de algunos alcaldes, el Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (SMAPA) de Tuxtla Gutiérrez se ha convertido en la posible fortaleza financiera del alcalde Ángel “Caído” Torres Culebro, quien ya colocó al frente de la misma al también tabasqueño Rafael Valenzuela López, calificado como uno de sus presuntos operadores financieros. Desde hace mucho tiempo se ha dicho que el SMAPA ha servido para desviar recursos utilizados en precampañas, campañas políticas, intereses de grupo, personales o simplemente para enriquecerse. Todo depende de la ambición de quienes lo administren. De acuerdo a la denuncia pública realizada por el regidor Francisco Rojas, el tabasqueño Rafael Valenzuela fue el que administró los dineros utilizados en la campaña de su paisano el “Ángel Caído”, en 2024, lo cual hace desconfiar de la forma en que se van a tutelar los recursos financieros de ese Sistema, a partir de su llegada. El cuestionamiento de Paco Rojas es demoledor para todos aquellos ciudadanos que apoyaron con su voto a Torres Culebro para que llegara a la presidencia municipal de Tuxtla: “¿Hasta cuándo vamos a seguir permitiendo que gente ajena a Chiapas venga a dirigir nuestros destinos? ¿Qué en Tuxtla y en Chiapas no hay gente capaz, que tenemos que traer gente de fuera?”.
LOS TABASQUEÑOS VALENZUELA Y EL “CAÍDO” SE FROTAN LAS MANOS
El representante popular tiene razón. Nadie tiene la responsabilidad de cuidar el dinero de los tuxtlecos, sino los mismos habitantes de la capital chiapaneca. El Ángel “Caído” ha demostrado que llegó con un hambre desmedida de hacer negocios y apoderarse del presupuesto del ayuntamiento, además del sueño guajiro de reelegirse en 2027. Ya saben a lo que le apuestan quienes se dejen seducir y vendan su voto y su conciencia por migajas económicas. Desafortunadamente el presidente municipal cuenta con el aval de regidores de Morena que se han convertido en sus cómplices y han traicionado al pueblo, porque desde la llegada de Ángel Torres a la alcaldía, en la primera sesión de cabildo firmaron un acuerdo para darle la facultad de hacer lo que se le viniera en gana. La mayoría de ellos abdicaron el poder de sus representados, para dárselo a quien ahora puede designar a cualquiera en los cargos en donde considera que puede saquear y apoderarse de la riqueza de las y los chiapanecos. Se pensaba que después de haber quedado en la orfandad política por el fallecimiento de Rosalinda López Hernández, “El Caído” Torres Culebro se abstendría de robar, pero todo parece indicar que el “Grupo Tabasco” ha recuperado fuerzas y ahora, desde el SMAPA, el joven Rafael Valenzuela habrá de administrar alrededor de 60 millones de pesos mensuales de esa dependencia. Según se sabe, el 70 por ciento del presupuesto se invierte en gasto corriente (nómina y pago a la CFE) y el restante 30 es para inversión, el cual se vislumbra como un gasto desordenado, que presumiblemente irá a parar a los bolsillos de los tabasqueños que se han incrustado en la alcaldía de Tuxtla Gutiérrez. Como dato adicional, en la capital del estado se sabe que el socio del “Ángel Caído” estuvo también en la Secretaría de Obras Públicas en el gobierno de Rutilio Escandón Cadenas y se convirtió en parte de esa camada de nuevos ricos tabasqueños que ahora trasporta en camionetas de súper lujo a la esposa, a sus hijos los manda con chofer y guaruras a la escuela y, por si eso no bastará, vive en una zona exclusiva de la ciudad. El SMAPA seguirá siendo la “Cueva de Alí Baba” si no se toman medidas a tiempo. De qué servirá que en la administración anterior, desde 2018, se haya disminuido considerablemente la deuda de mil 256 millones de pesos que el Sistema tenía. Hay que ver con cuánto la recibió el socio de Torres Culebro y con cuánto la dejará en 2027. Ya no se puede permitir que haya más corrupción e impunidad en el ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez. ¿Qué maldición se estará pagando para merecer a gobernantes como estos tabasqueños cuestionados? No se necesita analizar mucho el tema, si esta gente emigró de su estado para Chiapas, es porque sin temor a equivocarnos ni en su tierra los querían.
720 MILLONES AL AÑO PARA METERLE MANO
Valenzuela López es un muchacho que ni siquiera tiene el perfil para ocupar el cargo, ya no digamos que tenga la edad o la madurez necesaria para administrar los recursos del pueblo; ah, pero eso sí, se dice que tiene una capacidad para enriquecerse de manera ilícita que hasta el mismo “Ángel Caído” le envidia.
DE TAROT Y ADIVINANZA
¿Los regidores que le dieron facultades al “Ángel Caído” seguirán traicionando al pueblo o harán acopio de dignidad para defender a los tuxtlecos? Deberían dejar de creer en el canto de las sirenas. El futuro político del tabasqueño es El Amate… Servidos.
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