Se debe atacar la lentitud desde la integración de un expediente y del compromiso de elaborar la resolución de forma inmediata, afirmó la candidata a ministra
Eugenio Hernández Sasso/Ultimátum
Como conocedora de los obstáculos dentro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la doctora Jazmín Bonilla García, candidata a ministra de este órgano supremo, afirmó que la burocracia es real y, desde los puestos que ha tenido, ha sido capaz de erradicar esas viejas prácticas injustificadas que retrasan la impartición de justicia.
Entrevistada por Eric Ordóñez, subdirector del diario Ultimátum, Jazmín Bonilla aseguró que muchos de esos vicios son técnicos, como es el caso de que los expedientes electrónicos tienen que ser idénticos a los físicos para que puedan archivarse.
Reveló que tan solo en 2024 llegaron 16 mil asuntos a la SCJN, de los cuales solo entraron 4 mil 888, pero, además, desde la admisión del expediente hasta que llega a la sala se lleva un aproximado de 45 días y de ahí para que llegue al archivo se lleva 145 días más, lo cual representa un retraso de casi un año.
Señaló que si se quiere justicia rápida se tiene que atacar la lentitud desde dos partes: la integración de un expediente, porque no puede haber sentencia si éste no está listo; y del compromiso de que se elabore la resolución de manera inmediata.
Señaló que desde muy pequeña estaba segura que un día llegaría a ser ministra de la SCJN, “lo que sí nunca me imaginé es que iba a tener que salir a pedir el voto para serlo”.
Subrayó que es de las últimas generaciones de magistradas y magistrados que acreditaron exámenes probando no solo sus conocimientos jurídicos, sino también sus habilidades como personas juzgadoras.
“Una parte muy importante de la que no se habla, y lo refiero como vocación, es que ser magistrada, ser jueza, ser ministra no es solo resolver juicios, es también entender que tienes una serie de personas colaboradoras que te apoyan para hacer tu función y parte de la vocación es tener la sensibilidad de no incurrir en prácticas de acoso laboral, acoso sexual, y entender que todas las personas que trabajan contigo son un engranaje que si no funcionan tampoco hay justicia”, precisó.
Señaló que tiene 21 años en el Poder Judicial Federal (PJF) y lo primero que le interesaba al momento de iniciar su campaña era que la mayor parte de la ciudadanía la conociera en 60 días.
El primer reto, dijo, fue informar a la gente sobre el proceso porque la mayoría no tenía idea de lo que iba a pasar el próximo 1 de junio.
En segundo lugar, añadió, tenía que explicar qué es una elección atípica donde no se van a encontrar con lo mismo a lo que estaban acostumbrados, sino que van a recibir seis boletasde diferentes colores con personas identificadas por números que tendrán que anotarse en un recuadro.
Señaló que esta elección excluye a quienes no pueden ver, a quienes no saben leer ni escribir, personas que sufren de daltonismo y aquellas que padecen dislexia.
Consideró que las brechas digitales también son un problema al que se enfrentan los ciudadanos en este proceso, porque no todos tienen acceso a Internet y, por lo tanto, no pueden consultar los currículums en la plataforma Conóceles del Instituto Nacional Electoral (INE).
Como conocedora del derecho, dijo que lo aprendido en las aulas se queda corto al enfrentarse a la realidad.
Jazmín Bonilla es licenciada en derecho con maestría en derechos humanos y democracia, y actualmente está por culminar su tesis doctoral en derecho y tiene estudios en el extranjero en derecho norteamericano y en tribunales constitucionales.
Asimismo, señaló que tiene muchos cursos en materia administrativa, fiscal, tributaria yecológica porque a lo largo de su trayectoria ha permanecido en preparación constante.
En cuanto a su desempeño laboral, manifestó que inició a los 19 años como meritoria, posteriormente ascendió a oficial judicial, también fue secretaria de juzgados mixto, auxiliar y de colegiado en un Tribunal Administrativo.
Posteriormente tuvo la oportunidad de llegar a la Corte, donde se ha desempeñado como secretaria de Estudio y Cuenta, secretaria de Acuerdos de la Segunda Sala y, en 2023,participó para ser magistrada de circuito y desde el 2024 funge como tal, pero está comisionada en la SCJN.
Informó que su nombre aparecerá con el número 04 de la boleta morada, el cual deberán anotar en el recuadro de la parte superior de la papeleta.
