Chiapas lidera tasa nacional de embarazos infantiles; persiste impunidad y silencio institucional.
Eric Ordóñez/Ultimátum
Durante 2024, niñas de apenas 10 años de edad dieron a luz en México. Chiapas se ubicó entre las entidades con los casos más alarmantes, con nacimientos registrados en Ocosingo, Tuxtla Gutiérrez, Chiapa de Corzo y Comitán de Domínguez, según datos oficiales recientemente divulgados.
Los registros revelan diferencias de edad preocupantes entre las madres y los padres. En Ocosingo, la madre tenía 10 años y el padre 17; en Tuxtla, una niña de 11 años dio a luz con un padre de 32; y en Comitán, otra menor de 12 años tuvo un hijo con un hombre de 30.
La Estadística de Nacimientos Registrados (ENR) 2023 del INEGI documentó que Chiapas encabezó la tasa de nacimientos entre niñas y adolescentes de 10 a 17 años, con 21.7 por cada mil mujeres en ese grupo de edad. En total, se reportaron más de 10 mil nacimientos en este rango, incluyendo 803 partos de niñas entre 10 y 14 años.
La fotógrafa y activista Ashley Frangie se sumó al llamado urgente en redes sociales para visibilizar esta problemática. “Eso no es amor. Eso no es normal. Eso es violencia sexual avalada por el silencio institucional”, escribió.
Organizaciones civiles, defensoras de derechos humanos y especialistas en salud han reiterado que los embarazos infantiles no son accidentes, sino consecuencia de violencia sexual y abuso sistemático, muchas veces sin castigo.
En teoría, la legislación mexicana reconoce que todo embarazo infantil es resultado de abuso. Sin embargo, los mecanismos de prevención, atención y acceso a la justicia siguen siendo ineficaces, y los casos de Chiapas se repiten año tras año, especialmente en municipios como Ocosingo, Tuxtla y Comitán.
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