La corrupción no se perdona, se castiga. Bajo esa consigna, tres exgobernadores que dejaron un desastre financiero y moral en la entidad, deberían reflexionar.
TAROT POLÍTICO/Amet Samayoa Arce
La presidenta Claudia Sheinbaum ha sido tajante en relación al tema de la corrupción que no se perdona, se castiga. Y bajo esa premisa, en el tablero político del país hay tres chiapanecos que deberían poner sus barbas a remojar: Rutilio Escandón Cadenas, Manuel Velasco Coello y Juan Sabines Guerrero. Tres exgobernadores que, lejos de rendir cuentas por el desastre financiero y moral que dejaron en Chiapas, siguen prendidos de la teta presupuestal con hasta ahora imperdonable impunidad.
Rutilio, Velasco y Sabines
Rutilio, el más reciente, se refugió en Miami con el título de cónsul, bajo el manto del Grupo Tabasco que encabeza Adán Augusto López, al que tanto se le debe la sombra del poder. Velasco Coello, convertido en un senador cómodo y sonriente, juega a ser verde pero con alma dorada o al color que negocie, y Sabines Guerrero, que desde Orlando goza de inmunidad diplomática, a pesar de que fue el que abrió la puerta al infierno financiero chiapaneco dejando una deuda impagable de más de 18 mil millones de pesos que aún hoy se arrastra como un castigo generacional, y que el secretario de finanzas Manolo Pariente ha calificado como criminal. La herencia de Sabines sigue lacerando a los chiapanecos. Velasco no se quedó atrás en tanto que Rutilio, el “austero” que presumía honestidad republicana, terminó rodeado de contratos inflados y operadores tabasqueños más ocupados en enriquecerse que en gobernar en cuyo antecedente saltan los nombres de Pepe Cruz y Ángel Torres “caído”.
La advertencia de la presidenta, no es menor
La advertencia de Sheinbaum no es menor. En su discurso de aniversario dejó claro que no habrá intocables, que los tiempos del “borrón y cuenta nueva” quedaron atrás. En esta tesitura, los tres exgobernadores deberían ir sacando sus barbas para remojarlas, porque la justicia con Chiapas está más cerca que nunca. Veremos que si el fuego de la 4T es purificador, los que saquearon al estado y que los reinventaron como diplomáticos o senadores, y hoy presumen de “leales” al proyecto nacional estarán en líos. Muy pronto lo sabremos.
De Tarot y Adivinanza
A propósito, será cierto que el despilfarrador Juan Sabines Guerrero se pavonea y jacta de que pronto dejará el Consulado -pero porque caerá para arriba-?. Dicen que vocifera que su amigo Marcelo Ebrard, Secretario de Economía, lo necesita y que lo nombrará en importante cargo de esa dependencia y que aún hay tema para el 2030. Será ? … servidos.

			
			