A través de la plataforma digital hipgive. org se busca costear 34 proyectos, con el propósito de fomentar y preservar el habla nativa en Chiapas y la península de Yucatán
Eugenio Hernández Sasso/Ultimátum
TGZ
A través de la plataforma Hipgive. org, la cual es de fondeo colectivo, se busca conseguir financiamiento para 34 programas de impacto social que tienen en común el fomento del uso de las lenguas originarias, afirmó Anita Gallagher, líder del proyecto Lenguas Vivas.
Los planes son del estado de Chiapas y la península de Yucatán, e impulsan el uso de las lenguas maya, tzeltal, tzotzil, zoque y tojol-ab’al, explicó en la entrevista con Alejandro Moguel y Javier Guízar para el diario Ultimátum.
Todos son diferentes y están organizados por grupos comunitarios u organizaciones sin fines de lucro, o a veces por líderes de la comunidad que tienen su propia iniciativa, reveló.
Entre esa gran variedad, todos se identifican por el compromiso de velar porque cada vez más personas puedan hacer uso de las lenguas maternas, agregó.
DESARROLLO DE ACTIVIDADES
Manifestó que trabajan con organizaciones, a través de las cuales capacitan, acompañan y le dan herramientas a sus integrantes para que puedan usar los medios de transacciones digitales, a fin de reunir los fondos que necesiten para llevar a cabo sus proyectos de lenguas originarias.
Declaró que en Lenguas Vivas han hecho, durante cuatro semanas, que esos 34 proyectos se den a conocer y se invite a las personas a sumarse con sus aportaciones en línea.
Informó que quienes se interesen por participar pueden entrar a la plataforma de Hipgive.org, ver los proyectos, decidir cuál les gusta y, mediante tarjetas de crédito, débito o el método de Paypal pueden dar su aportación.
EJEMPLOS
Reveló que hay un proyecto que se llama “Recuperando los saberes al sonido del tambor”, de la organización Tzome Ixuk, Mujeres Organizadas A.C., que se encuentra al Sur de Chiapas, y están buscando juntar 30 mil pesos para la compra de 15 tambores y 10 carrizos.
Lo que buscan es que a través de su grupo se mantenga viva la lengua tojol-ab’al en niños y niñas de la región, a través de la música tradicional de sus abuelas y abuelos.
Asimismo, hay otro grupo de mujeres artesanas que todos los días van a trabajar, pero sus pequeños hijos se quedan esperando mientras ellas hacen su labor.
El proyecto estriba en juntar fondos para crear una ludoteca que permita a los niños y niñas estar cuidados, con material de desarrollo para su estimulación y que quien se quede con los menores hable tzeltal.
Consideró que de esa manera se logra la continuidad de la lengua materna, porque muchas veces comentan en las comunidades que uno de los grandes problemas es la falta de personas hablantes de las lenguas originarias para dar clases.
Otra situación, añadió, es la discriminación que sienten las personas y, por esa razón, de una generación a otra se pierde la lengua.
Con estos proyectos se está logrando que cada vez más personas jóvenes tengan oportunidades para crecer como multilingües, “como algo muy importante en nuestro México de hoy”, expresó.
Sugirió que la gente ingrese a la plataforma de hipgive. org y seleccionen la imagen de Lenguas Vivas, “y es como ir de compras porque van a ver los 34 proyectos”, hacer clic en cada uno de los títulos e investigar sobre ellos.
Dijo que hay un concepto de que la lengua maya está en riesgo de perderse “y no lo veo así después de este proyecto. Veo una gran cantidad de personas que hablar maya es su día a día”.
Agregó que desde la perspectiva de hipgive les ha dado gusto que muchas iniciativas, desde la península de Yucatán y también en Chiapas, sean lideradas por jóvenes.
Estos muchachos, declaró, se apenan cuando regresan a sus comunidades y ven a niños y niñas hablando en español.
Esto los ha llevado a elaborar proyectos como en Quintana Roo, donde ya desarrollaron un currículum escolar en medio ambiente y recursos naturales en lengua maya y lo están trabajando con la Secretaría de Educación.
INCONGRUENCIA
Expuso que desafortunadamente lo que tiene que ver con lenguas, cultura y el derecho de vivir en un lugar multicultural, multilingual, no está siendo priorizado por las autoridades.
Existe por ley, señaló, pero no hay congruencia entre lo que dice el papel y lo que pasa en el campo.
“Muchas organizaciones nos han contado que si bien existen de vez en cuando convocatorias y oportunidades de financiamiento por parte de las autoridades, son muy competidas. Debes de tener mucha institucionalidad, los trámites son largos y complicados y los fondos son muy reducidos”.
Invitó a las personas a donar en línea a través de hipgive.org para esos 34 proyectos de lenguas maternas, porque la plataforma va a donar 12 mil dólares que serán distribuidos de manera proporcional entre todas las organizaciones, de acuerdo al número de donantes que registren.