Juan Manuel Blanco/Ultimátum
TAPACHULA
Una caravana de cerca de mil migrantes salió la tarde del sábado de Ciudad Hidalgo, Chiapas, límite fronterizo de México con Guatemala, con destino a los Estados Unidos, en busca de trabajo y mejores condiciones de vida, a pesar de las nuevas restricciones de aquel país.
Esta es la primera caravana de migrantes que ingresó de manera irregular en este año en el mes de julio, quienes buscan llegar a Tapachula desde la noche del sábado para descansar y salir por la madrugada para continuar su recorrido.
Al frente de la caravana, dos venezolanos llevan una manta “S.O.S, Libertad y paz”, en su marcha por la frontera Sur.
En este grupo de migrantes viaja el venezolano Miguel Garrido, quien estableció que su propósito es poder llegar a los Estados Unidos, sin embargo, estuvieron esperando cinco días en Ciudad Hidalgo con la promesa de que los atenderían, pero fueron engañados.
Pidieron que les ayuden con autobuses, aunque se los cobren, para evitar molestias a la población mexicana. “Venimos con un grupo de migrantes pidiendo al gobierno que por favor se aboque al programa que tenemos acá, aquí vamos personas, con niños, que vendieron sus casas, sus carros, tienen un negocio, nos traen acá de pueblo en pueblo, queremos que por favor nos dé respuesta Migración que nos lleva de pueblo en pueblo para que hagamos gastos”.
Este migrante sudamericano se dedicaba a la construcción de obras, pero decidió dejarlo todo para poder ayudar a su familia, debido a la crisis económica y política que pasa Venezuela.
En su tránsito de este grupo de migrantes, integrantes del grupo” Beta” invitan a las personas para seguir caminando y a otros a subirse a los colectivos de manera pacífica, sobre el acotamiento de la carretera hasta llegar a Tapachula.
Otro de sus compatriotas es Iker Humberto, quien denunció que el Instituto Nacional de Migración (INM) los regresó al puente internacional de México con Guatemala, por lo que se organizaron en Ciudad Hidalgo y decidieron salir caminando para buscar el paso libre a la frontera Norte.
Asimismo, Estefany Madrid, migrante venezolana, indicó que decidieron salir caminando por su propia voluntad, sin que nadie los obligara y van en paz, sin protestar y sin afectar a nadie.
Esta migrante se dedicaba a las labores cotidianas en su casa, pero decidió emigrar para sostener a sus hijos que dejó en Venezuela.
“Vamos en el verdadero sueño americano que es éste, los que siguen caminando, nos toca acatar las reglas o esperar la cita, la cosa es que nos dejen pasar México”.
En la carretera Ciudad Hidalgo-Tapachula esta caravana de migrantes es custodiada por unidades de la Guardia Nacional División Caminos, policías estatales y municipales durante todo el recorrido hacia la ciudad Tapachula.
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