A donde vamos
Enriqueta Burelo/Ultimátum
El 22 de octubre se llevó a cabo en Palenque, una importante reunión con representantes de diversos países de centro y latinoamericana, con el fin de afrontar y hacer propuestas en torno al tema migratorio, un problema de carácter humanitario que ha rebasado a las instituciones mexicanas y supongo que a las de la región advocadas a ese renglón y para el cual no se encuentra una salida digna, que implique el reconocimiento del problema en primer lugar y que haga visible la necesidad de fortalecer las instituciones, no al estilo Nayib Bukele, presidente de El Salvador a quien muchos admiran por sus discursos en torno al combate a la delincuencia, pero a quien veo más como un dictador en proceso, el mismo se define en su cuenta X como “el dictador más cool del mundo mundial”. Quienes vivimos en Tuxtla, nos enfrentamos a un fenómeno nuevo, migrantes en cada puerta de los comercios y farmacias más visitadas, pidiendo dinero en los lugares más insólitos, insólitos digo, porque se alejan de los lugares comunes como el centro de Tuxtla y te los encuentras en la carretera a Villaflores, Plan de Ayala, Patria Nueva, en todos lados, diría hasta en la sopa, pero al que me encuentro en la sopa es a Pepe Cruz.
El tema de la migración un fenómeno internacional, lo sufre Europa y lo sufre México, como país de paso, y en ocasiones ya no solo de paso sino de permanencia, y actualmente no solo tenemos a la migración de siempre: guatemaltecos, salvadoreños, hondureños, hoy, haitianos, venezolanos, africanos, cubanos, otra característica, anteriormente la migración era masculina y hoy vienen con todo y familia, lo que implica otro tipo de servicios. “Todos conocemos por qué los territorios expulsan migrantes: violencia, factores económicos, mal manejo de fenómenos naturales… pero sobre todo está la impunidad y corrupción, porque eso va en detrimento del acceso a servicios básicos para la población”, dice Julia González, coordinadora de la Mesa Nacional para las Migraciones de Guatemala (Menamig).
En México y sobre todo en Chiapas, no queremos que sucedan situaciones como lo que ha pasado en la frontera con Brasil y Venezuela, donde con palos y piedras, habitantes xenófobos atacan a venezolanos agrupados en el lado brasileño de la frontera. Los ciudadanos de Pacaraima aseguran que la migración afecta a sus familias. En las noches, los refugiados se esconden por miedo a las agresiones hostiles. Se estima que desde el 2017 han ingresado por esa ciudad más de 127 000 venezolanos. También es verdad, que hace tiempo que los venezolanos no solo huyen de la dictadura. Lo hacen también del hambre y de la violencia diaria, así como los hondureños, los guatemaltecos o los salvadoreños. Todos son instrumentalizados en una espiral de intereses políticos.
Cada vez son más los países que los dejan a su suerte. Retrocediendo en la historia en 1991 siendo presidente Carlos Salinas de Gortari, se lleva a cabo la Cumbre Tuxtla, que reunió a los presidentes de Centroamérica, especialmente, ahí en solitario destacaba Violeta Chamorro, presidenta de Nicaragua, como hoy la presidenta de Honduras, Xiomara Castro. En ese momento las preocupaciones se centraban en la persistencia de conflictos armados en la región, el proceso de diálogo entre el Gobierno y el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), satisfacción por la voluntad del Gobierno de Guatemala de mantener abiertos los canales de comunicación con la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG) a fin de lograr el cese de las acciones armadas de ese Grupo y su incorporación a la vida política en ese país.
Dentro de los acuerdos de la Cumbre, los firmantes, instaron a la comunidad internacional y espacialmente a los organismos financieros internacionales, a que apoyen decididamente la ejecución de un Plan de Emergencia tendiente a resolver los problemas que enfrenta Nicaragua para la reconstrucción económica y social del país, cercana la revolución sandinista de la que Daniel Ortega, había formado parte. Se señaló el tema migratorio, y los presidentes manifestaron que los flujos migratorios en la región obedecen, entre otras cosas; a un conjunto de fenómenos socioeconómicos. Reafirmaron su voluntad política de efectuar consultas para atender los problemas que plantean en los diferentes países, dentro del respeto a la dignidad humana que merecen los migrantes y teniendo en cuenta su derecho al retorno voluntario. 32 años han pasado y no hemos logrado avanzar en lo que corresponde a los temas torales de la región, la pobreza, el crimen organizado, migración, la ausencia de condiciones favorables laborales, héroes convertidos en dictadores como el caso de Daniel Ortega en Nicaragua, no logro comprender porque el desarrollo de nuestra región, no es lineal, retrocesos terribles, manchados por la corrupción y la impunidad, que nos espera, si no se conduce el timón con mano firme, pero también humana y generosa. Los movimientos de huida en América Latina tienen diferentes motivos, pero también un denominador común: escasez y miseria. Y estas no entienden de ideologías. enriquetaburelomelgar@gmail.com