Andres Llanos
@Andres Llanos71
Para todo presidente mexicano, el cuarto año de gobierno representa un parte aguas entre la historia y el olvido. Significa un corte de caja, con las agravantes del desgaste natural del ejercicio del poder, los errores propios y de los colaboradores, el juicio evaluatorio de la sociedad y el ambiente de crispación que trae la sucesion presidencial.
Para Andrés Manuel López Obrador ha comenzado la recta final de su mandato, cercano a los cuatro años, ha comenzado la evaluación ciudadana que se pregunta si el país esta mejor que antes del 2018, en cuanto al crecimiento economico, desarrollo de la nacion, el combate a la corrupcion, la inseguridad, la pobreza, el rezago educativo, la creación de empleos, el mejoramiento del sistema de salud . la inversión nacional y extranjera? .
En términos generales si se ha administrado el país con profesionalismo político, con ejecución de estadista y no con los viejos vicios del pasado.
Ahora el discurso prometedor pasa a segundo termino, porque los hechos ocupan el escenario de la realidad.
En favor del gobierno actual se puede decir que ahí están las obras emblemáticas como el AIFA, el tren maya, la refinería de Dos Bocas, que se pensaría pueden salvar el sexenio. A pesar de los cuestionamientos de inviabilidad que los rodea. El crecimiento de la deuda publica, la desmedida cifra de muertes violentas, el manejo inadecuado de la pandemia que generó una cifra estimada de mas de 600 mil muertes, constituyen los claroscuros del gobierno de la cuarta transformación.
Por todo lo anterior, es lógico pensar que el cierre del gobierno de AMLO, será tan complicado como lo tuvieron sus antecesores.
El escenario de la sucesión esta comenzando y generando un ambiente ajeno a la voluntad del mandatario. Quien pronto por causa de la inercia, pasará a segundo término.
Al presidente ya no lo cuida el pueblo, ya no lo sigue la muchedumbre. Ha comenzado a bajar el rating de las mañaneras. Las protestas se escuchan en las giras y en los aviones.
El presidente pronto quedará a merced del cuarto de la soledad en Palacio Nacional. Donde el silencio se le presentará para mostrarle lo que pudo ser.