El problema es que esa región de Chiapas ha dejado de ser productiva.
✍?ACÁ ENTRE NOS | Alejandro Moguel
Es cierto, el puente atirantado de La Concordia es una obra majestuosa, que era esperada por los pobladores desde hace más de cincuenta años, porque significará una vía más rápida entre Tuxtla Gutiérrez y la frontera con Guatemala. Pero hace falta algo fundamental: paz y tranquilidad en la región.
Antes, quienes deseaban ir de Frontera Comalapa hacia la capital chiapaneca tenían que ir a una gran vuelta hasta Comitán. Y, si optaban por Motozintla y Huixtla-Tonalá-Arriaga-Ocozocoautla-Tuxtla, era todavía más lejos. Hoy el tramo ha quedado en 190 kilómetros.
“Con este puente (El de La Concordia) y con el de Rizo de Oro van ustedes a tener una comunicación con menos tiempo para llegar a la capital del estado. Es una gran obra y por eso nos comprometimos a construirla, terminarla. Es un compromiso cumplido”, afirmó el presidente, Andrés Manuel López Obrador, durante la inauguración de la obra el reciente fin de semana.
El primer mandatario anunció que el puente Rizo de Oro y el camino hasta Frontera Comalapa pasarán por Chicomuselo y por todos los pueblos, y quedarán listos antes de concluir su mandato. Dijo que, como parte del acuerdo, el gobierno de Chiapas mejora y construye los 60 km restantes de carretera.
Acompañado por la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, reconoció a los trabajadores camineros, puenteros, y en general a los trabajadores de la construcción, empresas, así como a mujeres y hombres ingenieros, quienes, junto con los obreros, son los mejores del mundo.
El problema es que esa región de Chiapas ha dejado de ser productiva, sus campesinos se fueron de migrantes hace mucho tiempo hacia Estados Unidos o ahora están huyendo a donde pueden y como pueden, porque las bandas del crimen organizado no les permiten trabajar honradamente.
Los gobiernos, el federal y el estatal, deberían buscar en forma rápida la forma de que la tranquilidad retorne a la región, que los campesinos regresen a sus parcelas o a sus casas en las cabeceras municipales. Que les provean de programas sociales que les ofrezcan bienestar y que les brinden mecanismos oficiales para que reinicien actividades lícitas para hacer producir sus tierras. Solamente así, toda la gente de esa región se verá beneficiada con esos puentes, el recién inaugurado y el otro que será terminado próximamente. De lo contrario, dicha comunicación terrestre servirá únicamente para la realización de actividades ilegales.
Respecto a la situación mencionada en esa región, la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum dijo que el gobierno federal mantiene acciones para que haya bienestar y se consiga la paz, que es fruto de la justicia, por lo que confió en que pronto se habrá pacificado el área.
“No me ha gustado, se los digo, lo que ha estado pasando últimamente; ya estamos interviniendo. Hay que hacer valer el nombre del municipio, La Concordia; hay que ir al camino de la justicia por la paz, por la tranquilidad, el transformar por el camino de la concordia. Tenemos que buscar la unidad de nuestros pueblos. La gente mayor, hay que hablar mucho con los jóvenes”, afirmó Sheinbaum.
Pues ojalá que así sea. Los chiapanecos tienen confianza en que los próximos gobernantes, tanto el estatal como el federal, echen mano de todo su talento y sus habilitades políticas para que la tranquilidad sea devuelta a muchas comunidades de Chiapas.
alexmoguels@hotmail.com