Es fundamental el papel de las comunidades indígenas en materia de cambio climático.
✍🏽Sarah Valenzuela
Las comunidades de Chiapas, además de habitar y depender directamente de los bosques, buscan alternativas de desarrollo económico que mitiguen los efectos del cambio climático, según el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), es fundamental para la conservación, el papel de las comunidades indígenas en la mitigación del cambio climático.
Leonardo Pérez, presidente de la Unión de Comunidades Indígenas “Las Dos Culturas el Cerro de la Cachimba”, organización que asocia a nueve comunidades indígenas de Cintalapa, consideró a la unión de voces y esfuerzos una estrategia para mejorar su economía.
Las actividades principales de la Unión Cerro de la Cachimba se centran en el manejo forestal comunitario y en la producción de maíz, café y cacahuate, y desde 2023, llevan a cabo junto a la organización Cecropia como socio local implementador, la iniciativa “Biofábrica en la Selva Zoque” con el apoyo del Mecanismo de Cooperación para la Conservación y el Desarrollo Sustentable de los Paisajes del Sur-Sureste de México.2
A partir del Programa de Acción ante el Cambio Climático del Gobierno del Estado de Chiapas, se identificó la Selva Zoque como una región vulnerable al cambio climático y la deforestación. Por eso, la iniciativa plantea establecer y operar una biofábrica que produzca, abastezca y comercialice bioinsumos derivados de residuos forestales y agropecuarios que hoy son considerados como desperdicios, para fortalecer la resiliencia de los medios de vida y de los ecosistemas de las comunidades en Cintalapa.
La iniciativa también busca gestionar un modelo de negocio con enfoque social, ambiental y de gobernanza corporativa y social (ESG), así como fortalecer las capacidades técnicas y empresariales del grupo que la opere.