Las y los diputados de la 69 Legislatura, encabezados por Luis Ignacio Avendaño Bermúdez y Mario Guillén Guillén, se han dado a la tarea de asistir a sus respectivos distritos.
TAROT POLÍTICO/Amet Samayoa
Las y los diputados de la 69 Legislatura, encabezados por Luis Ignacio Avendaño Bermúdez y Mario Guillén Guillén, se han dado a la tarea de asistir a sus respectivos distritos para informar acerca de las actividades que realizan en el Congreso del Estado. Aquí lo interesante es que esas reuniones con la población sirven como foros para dar a conocer su trabajo, pero, a la vez, se aprovechan para conocer de viva voz el sentir de la población. Esto significa que la nueva generación de legisladores no solo llega a sentarse en la curul para levantar el dedo por consigna, como normalmente ocurría en otras ocasiones, sino que en esta Nueva ERA permanecen en el territorio para explicar cómo devengan su dieta mensual. Acciones como estas no tendrían la menor importancia si no fuera porque significan, en el fondo, voluntad para rendir cuentas a la población, mantener el contacto directo con la ciudadanía y fomentar la participación ciudadana. Por supuesto que, al regresar a sus comunidades, las y los diputados tienen la oportunidad de explicar cómo han utilizado los recursos financieros del Poder Legislativo, además de promover la transparencia y la rendición de cuentas ante sus electores, es decir, regresar al territorio para tratar directamente con la gente e impulsar una sana relación entre gobernantes y gobernados.
Diputadas y diputados a sus distritos
Al escuchar el sentir de la ciudadanía, quienes integran la 69 legislatura tienen también la oportunidad de entender con claridad sus preocupaciones y atender con eficacia sus necesidades. Esto puede ayudar a las y los legisladores a tomar decisiones basadas en la realidad, de suma importancia para sus representados. La comunicación siempre ha sido necesaria, solo que en épocas anteriores las y los integrantes del Poder Legislativo hacían campaña en sus respectivos distritos, asumían el cargo y la población jamás los volvía a ver por sus comunidades. Esto causaba desilusión entre los votantes y, por ello, muchos políticos perdieron representatividad y hoy se encuentran olvidados en el basurero de la historia. A ningún político se le debe olvidar que los tiempos actuales ya no son en nada parecido a los de antes, toda vez que en períodos anteriores abandonaban a la población y a los tres años se volvían a presentar en las diferentes localidades del estado con pollitos, patitos, despensas que llevaban arroz y frijol con gorgojo y engañaban a los ciudadanos para que votaran nuevamente por ellos. Ahora ya no es así, el pueblo está totalmente politizado. Es por ello que al fortalecerse la relación entre los representantes del Poder Legislativo y sus electores, se abre la oportunidad de informar sobre sus actividades, de tal manera que la validación del trabajo en el Congreso del Estado ayuda a las y los diputados a demostrar que están trabajando en temas que realmente importan a su comunidad, y si así no fuera también tendrán la oportunidad de enderezar el camino. Con ello, seguramente la gente volverá a confiar en sus representantes populares, ya que la falta de interés por la rendición de cuentas que se vivió en el pasado, provocó una crisis de representatividad que llevó al entonces partido hegemónico a perder el poder y, en la actualidad, a estar a punto de la desaparición. Es ponderable esta labor que han iniciado las y los legisladores actuales, pues de esa forma se logrará el fortalecimiento de la democracia, toda vez que al sentirse parte de las acciones que se llevan a cabo en el parlamento local, la población dejará de ser simple espectadora y tomará parte en las decisiones. No hay que olvidar que el poder está en el pueblo y quienes están en el Congreso solo son sus representantes. Ojalá y esta práctica continúe por siempre.
De Tarot y Adivinanza
A propósito, ¿tendrá algo que informar al electorado el diputado “Chaparro de oro”? Habría que preguntarle si ya alzó la voz en contra del gobierno corrupto de Rutilio Escandón que le tocó administrar-estrujar… Servidos.
