ERA lanza advertencia: “No más violencia”

Ramírez Aguilar aseguró que no permitirá que se repitan hechos como la emboscada en Frontera Comalapa.

Eric Ordóñez/Ultimátum

Tras la emboscada que dejó policías muertos en el ejido Sabinalito, municipio de Frontera Comalapa, el gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar, condenó enérgicamente los hechos y aseguró que su gobierno actuará con firmeza para evitar que la violencia vuelva a instalarse en la región. “Que me escuchen fuerte y claro: no voy a permitir que vuelvan los hechos de violencia aquí. Eso se acabó”, sentenció el mandatario en un mensaje público.

Durante su intervención, Ramírez afirmó que giró instrucciones directas al secretario de Seguridad del Pueblo y a la Fuerza de Reacción Inmediata Pakal, además de establecer contacto con el fiscal general del Estado, con el objetivo de garantizar una respuesta contundente. “No hay miedo a aplicar la ley. Pero de este lado también tenemos valor”, sostuvo al asegurar que su administración llegará “hasta las últimas consecuencias”.

Dirigiéndose a los habitantes de Pinola, el gobernador aseguró que el valor de las autoridades proviene de la indignación social. “Nos duele lo que le duele a Chiapas. Tenemos corazón para sentir”, expresó al comprometerse con las víctimas y sus familias.

La Fiscalía General del Estado, por su parte, informó que ya inició las investigaciones correspondientes por la agresión contra elementos de la Secretaría de Seguridad del Pueblo y desplegó personal especializado en la zona para el esclarecimiento del caso. El fiscal Jorge Luis Llaven Abarca reiteró que se actuará sin impunidad y que se agotarán todas las líneas de investigación.

En tanto, la Secretaría de Seguridad del Pueblo confirmó que los policías fueron atacados por un grupo armado presuntamente vinculado a la delincuencia organizada. En respuesta, más de mil elementos de seguridad fueron enviados a Frontera Comalapa para controlar la situación y proteger a la población.

La dependencia aseguró que mantendrá una presencia “fuerte y decidida” en la región, reiterando su compromiso con la paz en Chiapas. La emboscada ha encendido las alertas sobre la capacidad de las autoridades para contener a los grupos criminales en una de las zonas más conflictivas del estado.