Antonio Noguera Zurita, director del Aeropuerto Internacional “Ángel Albino Corzo”, quedó señalado como parte del clan del llamado Grupo Tabasco, que en tiempos de Rosalinda López Hernández operó un entramado de favores y contratos inflados.
TAROT POLÍTICO/Amet Samayoa Arce
Pertenece al clan del famoso y mal oliente Grupo Tabasco, ese que en su momento empoderó en Chiapas, doña Rosalinda López Hernández (q.e.p.d.), esposa del ex gobernador Rutilio Escandón Cadenas y hermana del exsecretario de Gobernación Adán Augusto López Hernández, Antonio Noguera Zurita, sigue aún aquí exponiéndose a tener como destino “El amate”. Desde la Sociedad Operadora del Aeropuerto Internacional Ángel Albino Corzo con la bendición de la señora Rosalinda, se construyó un entramado de traficantes del erario público, donde figuraban tres nombres clave: Pepe Cruz ex secretario de salud y ahora flamante senador; Ángel “Caído” Torres Culebro, abogado que fungió como Secretario de Obras Publicas y aún alcalde de Tuxtla y, el hoy cuestionadísimo Antonio Noguera Zurita, director del Aeropuerto Internacional “Ángel Albino Corzo”, a quien de manera mordaz e irrebatible el periodista Miguel Ballinas lo ha desnudado como un verdadero patán que no cabe en el gobierno humanista de la nueva ERA. Ese clan operó sin freno: contratos de obra inflados, negocios de servicios, favores políticos, tráfico de influencias. Mientras Chiapas se hundía en la pobreza y desatención, ellos amasaban fortunas y colocaban a sus alfiles en puestos estratégicos. El aeropuerto, por supuesto, no fue la excepción.
No cabe en un gobierno humanista
Noguera Zurita volvió a Chiapas en condiciones clase media pero en poco tiempo aprendió las mañas del poder. No tenía carrera, ni perfil técnico, ni visión aeroportuaria, pero tenía padrinos. Y en política, con eso basta para “despegar”. Así fue como el aeropuerto más importante de Chiapas quedó en manos de un funcionario sin escrúpulos que hoy acumula denuncias de maltrato laboral, despidos injustificados, caprichos absurdos y obras de pésima calidad que se caen a pedazos con las primeras lluvias. El colmo: corre a trabajadores de base como si fueran desechables, trata a los de seguridad privada como bestias de carga y obliga a su personal a cumplir caprichos ridículos —como barrer calles enlodadas porque supuestamente pasaría la esposa del gobernador. Ese nivel de servilismo político no solo es grotesco, es ofensivo para los chiapanecos. La Terminal de Carga, inaugurada con bombo y platillo, no cumple su función. Trasciende que ni un solo avión carguero ha salido de ahí con productos chiapanecos. Las ampliaciones recientes están plagadas de goteras y fallas estructurales. Y aun así, Noguera sigue intocable. ¿Por qué? A pesar de que es el último sobreviviente visible de aquel Grupo Tabasco que sembró corrupción en Chiapas que no tiene fuero?.
De Tarot y Adivinanza
Quién sabe perfectamente cómo se saquearon las finanzas de Chiapas y cómo se movieron los millones del grupo Tabasco? Respuesta: el actual diputado local y ex secretario de Hacienda, Javier Jiménez Jiménez. Él conoce la ruta del dinero y podría narrar de memoria cómo se construyó la red de negocios turbios que hoy mantiene a personajes como Noguera como los nuevos millonarios en tanto de el “JJ el chaparro de oro calla”… servidos.
