Rojas y Latournerie acusaron irregularidades en contratos y servicios, además de la negativa para acceder a expedientes del Cabildo.
Eric Ordóñez/Ultimátum
En conversación con el director de Diario Ultimátum, Amet Samayoa Arce, los regidores Francisco Rojas Toledo y Areli Guadalupe Latournerie Castellanos denunciaron falta de diálogo institucional, opacidad en la información pública y posibles irregularidades administrativas en la actual administración de Tuxtla Gutiérrez, encabezada por Ángel Torres Culebro. Afirmaron que, pese a múltiples solicitudes, secretarías y direcciones no responden a gestiones ni comparten expedientes bajo el argumento de ser “información sensible”.
Rojas Toledo consideró que el reciente relevo en la Coordinación de Regidores —donde, dijo, se alcanzaron seis votos de un total de nueve— envía un “mensaje político” de inconformidad dentro del propio cabildo. “Nos hemos unido varios regidores buscando el beneficio de la ciudad; hay compañeros que ni siquiera son recibidos por el Presidente o por sus funcionarios”, apuntó.
Latournerie sostuvo que el cabildo es el máximo órgano municipal y que negar información a un regidor vulnera la rendición de cuentas: “Pedir un expediente y recibir por oficio que es ‘delicado’ para no entregarlo es inadmisible. Hay poca transparencia y múltiples fallos frente a la ciudadanía”.
PIDEN GLOSA Y REVISIÓN DE OBRA PÚBLICA
Las y los ediles solicitaron formalmente que, tras el informe del alcalde, se realice la glosa ante el cabildo, con comparecencias de secretarios y entrega previa de cifras y documentos. “No es obligatorio por ley, pero es un ejercicio mínimo de transparencia”, recordó Latournerie. A la fecha —expusieron— no hay fecha definida para ese ejercicio.
En materia de obra pública, señalaron que no conocen los procesos de contratación, montos y tabuladores aplicados: “Si cuesta trabajo acceder a información básica, imagínese en obra pública”, dijo la regidora.
CASO PEÑA HUERTA Y PERMISOS EN ESPACIOS PÚBLICOS
Sobre el evento privado en el parque Peña Huerta, Rojas cuestionó cómo se autorizó un uso con montaje de mesas en un área pública. Aunque se habló de bajas administrativas (directora y encargado de fines de semana), pidió investigar quién emitió la autorización por oficio y si hubo indicaciones superiores. “Solicitamos que Contraloría investigue. Esto no puede quedar en responsables menores”, señaló.
BASURA, ALUMBRADO Y COMPRAS CUESTIONADAS
Ambos regidores aseguraron que las quejas ciudadanas más frecuentes son por recolección de basura y alumbrado público. Señalaron como ejemplo un contrato para lavado de contenedores adjudicado a una empresa sin experiencia acreditada en esa actividad (señalaron que su giro real sería de papelería/trámites), con alta reciente y firma casi inmediata: “Tuxtla necesita proveedores capaces, no simples intermediarios que conviertan el servicio en negocio”, dijo Latournerie.
También mencionaron compras de contenedores sin contar con suficientes camiones recolectores, así como la adquisición de láminas y tinacos presuntamente a sobreprecio, y un contrato por 3 millones de pesos para “arreglar la normatividad” que —afirmaron— fue frenado tras su intervención, pese a que la persona ya laboraba en el ayuntamiento sin contrato firmado.
Cuestionaron, además, un programa del DIF municipal de entrega de pollos en colonias urbanas: “Sin condiciones de traspatio ni esquema técnico de seguimiento sanitario y alimentario, parece ocurrencia o acción electorera”, dijo Rojas.
“NO ES OBSTRUCCIÓN: ES CONTRAPESO”
Ante críticas en redes sobre su insistencia en señalar anomalías, Rojas respondió: “No nos vamos a cansar. Nuestra función es vigilar que la administración marche bien”. Dijo haber enfrentado seis auditorías cuando fue alcalde y que salió limpio. Retó a que, si se prueba alguna falta suya, renunciaría a la regiduría.
Latournerie añadió que todas sus denuncias están documentadas: “Se fue el Oficial Mayor, la directora de Adquisiciones, y dejaron de comprar a una comercializadora señalada. No hablamos por hablar; hay oficios, mensajes y seguimientos”.
LLAMADO A LA CIUDADANÍA Y PRÓXIMA AGENDA
Ambos invitaron a la población a denunciar con evidencia irregularidades en servicios y contrataciones. “Un gobierno responde mejor cuando la sociedad es exigente y participativa”, dijo Latournerie. También insistieron en que desean que a Tuxtla le vaya bien, pero no avalarán prácticas indebidas.
Al cierre, reiteraron que mantendrán el contrapeso desde el cabildo y que ofrecerán a cualquier ciudadano acceso a sus evidencias y rutas de denuncia. “Estamos para servir; nuestra oficina está abierta para recibir reportes y documentarlos”, concluyeron.

