Originario del pueblo Zoque de Soyaló, Chiapas, fue Gobernador con todo el aparato de gobierno en contra y con miles de chiapanecos a su favor,
IDENTIDAD POLÍTICA/José Adán Altúzar Figueroa
Pablo Salazar Mendiguchía fue gobernador del estado de Chiapas, México, entre el 8 de diciembre de 2000 al 7 de diciembre de 2006. Su administración se caracterizó por una fuerte agenda de reconciliación política, reformas sociales y esfuerzos por impulsar el desarrollo económico y humano en una de los Estados más diverso y complejo del país.
Pablo Abner Salazar Mendiguchia, originario del pueblo Zoque de Soyaló, Chiapas, fue Gobernador con todo el aparato de gobierno en contra y con miles de chiapanecos a su favor, Roberto Armando Albores Guillén, apoyó ferozmente a Sami David David, Priista de hueso colorado, un personaje gris, construido por sus relaciones políticas con Manlio Favio Beltrones Rivera y otros llamados alquimistas, si, el mismo que sigue señalado como uno de los artífices del magnicidio de Luis Donaldo Colosio Murrieta, candidato a Presidente de la República.
Pablo Salazar logró lo inimaginable, aliar a 8 partidos políticos locales y nacionales, construyó una campaña de la esperanza, misma que se disipó cuando tuvo que decidir quien sería su sucesor, designando a Rubén Velázquez López, un personaje carente de habilidad política, inseguro e incompetente para asumir tan grande responsabilidad, razón que lo obligó ante la notoria posibilidad de que el “gallo” del Gobernador perdiera las elecciones, bajó del cargo a Rubén Velázquez y mediante maniobras fuera de la ley, Juan José Sabines Guerrero, renuncio a su militancia del PRI, al no verse favorecido para aspirar a la Gubernatura de Chiapas, después de haber sido Presidente Municipal de Tuxtla por las siglas del PRI, siendo elegido José Antonio Aguilar Bodegas, un personaje soberbio, desposta, muy poco aceptado entre las élites políticas locales y nacionales y con mucho menos seguidores, a diferencia del que a la postre y por todo el apoyo de Pablo Salazar, sería el Candidato al Gobierno de Chiapas por el PRD, Juan José Sabines Guerrero, quien valiéndose del nombre de su padre Juan Sabines Gutiérrez, quien fue efímero gobernador de Chiapas por menos de tres años, pero quien aun en esos años representaba para los anclados al pasado un romanticismo por sus desplantes de altanero, mal hablado y ofrecedor de dádivas obtenidas del erario público. No obstante, estos apoyos políticos, durante el mandato de Sabines Guerrero promovió la privación de la libertad en contra de su mentor.
Pablo Abner Salazar Mendiguchia, hecho auténticamente en Chiapas, bonachón, agradable, autentico, con habilidades políticas que le daban identidad chiapaneca, representó para la mayoría de los Chiapanecos, la ESPERANZA de un cambio, impulsado por la supuesta alternancia del PRI al PAN periodo que ya se había definido eligiendo para Presidente de la República al tristemente recordado Vicente Fox Quezada.
Al ser hecho en Chiapas, conocedor de la realidad chiapaneca, desde los cargos como Director Jurídico, Subprocurador, Titular del entonces IFE en el Estado, Secretario de Gobierno y Senador de la República, para luego ser, después de haber sido expulsado del PRI, Candidato al Gobierno de Chiapas por el PAN, PRD, PT, PVEM, PSM, PCD, PAS y Convergencia.
Pablo Salazar llegó al poder tras una elección histórica en la que participaron amplias coaliciones ciudadanas y partidos políticos opositores. El estado de Chiapas atravesaba una etapa de conflicto social, marcada por el alzamiento zapatista de 1994 y la alta marginación de las comunidades indígenas. Su gobierno representó un cambio respecto a los largos años de dominio priista en la entidad.
Principales Acciones y Políticas Públicas
Reconciliación social: Salazar impulsó mesas de diálogo con organizaciones indígenas, campesinas y sociedad civil, buscando soluciones pacíficas a los conflictos agrarios y sociales.
Educación: Se implementaron programas para ampliar la cobertura educativa en comunidades rurales y se mejoraron infraestructuras escolares.
Salud: El gobierno promovió campañas de salud pública, construcción de hospitales y centros de atención médica, priorizando la atención a sectores vulnerables.
Transparencia y rendición de cuentas: Se crearon organismos ciudadanos para supervisar el gasto público y se promovió la lucha contra la corrupción.
Infraestructura: Se realizaron inversiones en carreteras, electrificación y obras hidráulicas para mejorar la conectividad y calidad de vida en la región.
Atención a desastres: Durante su periodo, Chiapas enfrentó varios huracanes y fenómenos naturales, lo que llevó a la creación de protocolos de protección civil y apoyo a damnificados.
A pesar de los avances, el gobierno de Pablo Salazar enfrentó importantes desafíos. Persistieron los problemas de pobreza extrema, desplazamiento forzado y tensiones entre grupos políticos y sociales. Al finalizar su mandato, surgieron acusaciones en su contra por presunto manejo irregular de recursos, por montos superiores a 15 mil millones de pesos, miles de estos por desviación de recursos destinados a la atención de los daños provocados por el huracán STAN, aunque posteriormente fue absuelto de varios cargos.
El gobierno de Pablo Salazar Mendiguchía marcó un periodo de transición política en Chiapas, abriendo el camino a nuevas formas de participación ciudadana y pluralidad partidista. Sus políticas de reconciliación y desarrollo sentaron bases para posteriores administraciones, aunque los desafíos estructurales del Estado continuaron siendo una tarea pendiente.
ULTIMÁTUM
La reconstrucción de 2000 km de carreteras representa una inversión significativa y aporta importantes beneficios a las comunidades, lo cual es valorado positivamente desde el ámbito político. En esta tarea participa directamente el Ingeniero Rafael Ruíz Morales, responsable de las carreteras estatales en Chiapas mediante la Comisión Estatal de Caminos. Su designación ha sido acertada y su trabajo destaca como un ejemplo de buena gestión gubernamental.
ULTIMÁTUM DOS
Para los que no quieran ver y oír, lo dicho recientemente por el Gobernador Eduardo Ramírez, ante la presencia de la Presidenta, deja en claro que después de los relevos en el aparato de Gobierno Federal, Chiapas copiará la misma decisión. Hay nanitaaaaa, decía mi Tía. Por el momento, es cuánto.
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