No piden privilegios sino las mismas oportunidades que los hombres y que quienes otorgan contratos también volteen a verlas; hacen los trabajos bien y más limpios, están a tiempo y son más responsables
Eugenio Hernández Sasso/Ultimátum
TGZ
Con el propósito de empoderarse y romper barreras en diferentes sectores, ser independientes y salir adelante solas, el Colegio de Mujeres Profesionales de la Industria de la Construcción A.C. (CMPIC) realiza diferentes cursos de capacitación en ese rubro, señaló la tesorera nacional de esa organización, Adriana Márquez Hernández.
Aunque en los diferentes municipios de Chiapas hay apertura para que este sector de la sociedad trabaje en el ramo de la construcción, “el porcentaje es muy bajo”, señaló Márquez Hernández en la entrevista que le realizaron Alejandro Moguel y Javier Guízar en los estudios del diario Ultimátum. Pidió igualdad de condiciones para sus representadas. “No pedimos privilegios, en lo absoluto, simplemente que nos den las mismas oportunidades que a los demás para que podamos desarrollar las mismas actividades que los hombres”, afirmó.
Recalcó que hasta hace algunos años todavía no se veían mujeres trabajando como obreras de la construcción, pero en la actualidad ya están más involucradas, “a lo mejor no están haciendo trabajo pesado, pero sí están como “bandereras”, pues todavía existen resistencias para dar un trato igualitario”. Explicó que el CMPIC tiene presencia en más de 30 estados de la república mexicana y países como Colombia, Perú, Bolivia y España.
Este es un colegio multidisciplinario, ya que se involucran diversas disciplinas académicas para desarrollar y contribuir con estrategias destinadas al fortalecimiento económico de la mujer, para proporcionar calidad y seguridad a la infraestructura actual, explicó la arquitecta de profesión. “Buscamos impulsar el empoderamiento económico de las mujeres e incrementar la capacitación, competitividad y eficiencia en la industria de la construcción, realizando cursos de capacitación en oficios no tradicionales, tales como electricidad, soldadura, acabados, albañilería, manejo de maquinaria pesada y herramienta menor, entre otras”, dijo.
En Chiapas, en los últimos años se han capacitado por lo menos 200 mujeres con los diferentes cursos desarrollados en el CMPIC, de los cuales han egresado 20 con conocimiento y capacidad para operar retroexcavadoras y rodillos. “Lo que el colegio está buscando es que haya más mujeres en esos oficios, es por eso que todavía lo hacemos llamar como oficios no tradicionales, porque no es muy común ver a una mujer trabajando dentro de eso, aunque ya hay una cierta cantidad en ello”. Sin embargo, no solamente se capacitan féminas en ese rubro, sino también a todas aquellas que ya tienen una profesión en ingeniería, topografía y arquitectura, “primero que nada en igualdad de género, porque ahorita nuestros instructores son hombres y se busca que quienes se habilitan ahora, puedan ser las instructoras del futuro”. Además, se hacen capacitaciones en contabilidad o administración de empresas, porque el área de la construcción abarca muchas carreras en su desarrollo.
METAS A CUMPLIR
Señaló que se ha visto que en la actualidad hay demasiada violencia en contra de la mujer, y por ello buscan que sea independiente y puedan salir adelante por sí mismas. Consideró que son mejores administradoras de los recursos, pues cuando trabajan hay la seguridad de que todo el dinero se va hacia su familia, la educación y a sus hijos. No estamos peleando con los hombres, subrayó, sino buscamos la igualdad de oportunidades. Es decir, que las dependencias involucradas en el ramo de la construcción, las que otorgan contratos por invitación o asignación directa, “también volteen a ver a las mujeres, porque hay mujeres constructoras que pueden realizar todo ese tipo de trabajo”. Demandó que se le den las mismas oportunidades que a los hombres, “que vean que tenemos las mismas capacidades y los mismos conocimientos para realizar estos trabajos”. Explicó que no tienen la misma fuerza que los varones, pero cuando les toca laborar en este rubro se organizan en equipos “y hacen los trabajos bien y más limpios, están a tiempo; más que nada la mujer es un poquito más responsable”.
Estos cursos, añadió, han sido muy satisfactorios para CMPIC, porque han llegado mujeres que han sido golpeadas o que han tenido problemas dentro de su casa y, al capacitarse, se van empoderadas, felices y contentas con lo que han aprendido. Relató que hubo una mujer que fue contratada en una empresa para desempeñar el trabajo de operadora de una retroexcavadora, pero debido al machismo que todavía existe en la sociedad solo duro tres años y renunció. “Al final como que el personal que tenía esa empresa no había comprendido que ella es una mujer y que tienen que respetarla”. Anunció que para el 12 y 13 de mayo del presente año se va a realizar un foro nacional en Chiapas, donde van a llegar personas de otros estados para tratar, fundamentalmente, el tema de la igualdad de género y la mujer en la construcción.